El equipo de economistas bonaerenses de Unión por la Patria, que encabeza Roberto Feletti, advirtió que la aprobación del Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI) "consolidaría una Argentina centrada en la producción primaria del subsuelo y generaría una ruptura del pacto fiscal federal delineado por la Constitución de 1994". Además, el informe de coyuntura económica de dicho grupo pone el foco en las inconsistencias del programa económico vigente y alertan sobre los peligros de la inserción internacional que lleva adelante el gobierno de Javier Milei. 

En su habitual análisis de coyuntura, el grupo de economistas de UxP subraya que el RIGI pretende ofrecer a las provincias con riquezas hidrocarburíferas y minerales, recursos para financiar proyectos de exploración, lo que a su vez les permitiría una mayor autonomía de los fondos federales. Tal proceso, señalan, pondría en crisis el pacto fiscal acordado en 1994 por el cual las provincias de menor tamaño se integraban a la Nación a partir del aporte de la Pampa Húmeda, en particular de la provincia de Buenos Aires. 

"De ese modo, el régimen promocional de las grandes inversiones contribuiría a desnacionalizar los activos argentinos -que deberían ser el vector de un programa de desarrollo inclusivo- pero además profundizaría la fragmentación de las regiones argentinas al no integrarlas a un proyecto común", apunta el trabajo de los economistas. 

"En el corto plazo, Luis Caputo eligió aplicar un plan fuertemente recesivo con el ajuste fiscal como ancla de los precios: la devaluación del 118% con una desregulación completa de los mercados produjo un desplome del consumo", refieren. "El diseño contractivo se completó con la supresión completa de la obra pública, la eliminación de las transferencias no automáticas a las provincias, la reducción de los subsidios económicos y el congelamiento de los presupuestos universitarios". 

Por otro lado, el informe correspondiente a mayo de 2024 sostiene que el programa de corto plazo del ministro exhibe inconsistencias en el combate a la inflación, ya que la política de reducción de tasas de interés termina alentando las presiones devaluacionistas. Los economistas bonaerenses concluyen que la proyección de ese recorrido no permite augurar variables estables para los próximos trimestres. 

En otro orden, el análisis destaca que los principales apoyos al programa de reformas estructurales provienen de los fondos de inversión internacionales acreedores de Argentina y de grupos empresarios locales con intereses en el sector energético, principalmente Panamerican Energy (Bulgheroni), Pampa Energía (Marcelo Mindlin) y TecPetrol (Techint-Rocca). 

En cuanto al resto del empresariado, los autores sostienen que la mayoría parece acompañar el proyecto de Ley Bases (con la expectativa de reducir costos y mejorar rentabilidad vía reformas laboral y tributaria) "aunque con una excepción relevante: el complejo agroalimentario". El distanciamiento del agro, apuntan, "coincide con la pretensión de Milei de llevar a cabo un planteo refundacional del país, por medio del cual el proveedor central de divisas pase a ser el conglomerado productor de energía y minería, mientras que el sector agropecuario queda, en este punto, en un segundo plano". 

Este cambio en la generación de dólares implicaría modificar la inserción internacional de la Argentina, una reestructuración que es impulsada por la alianza de actores internacionales y locales que está detrás del gobierno de Milei: un bloque de poder conformado por agentes económicos transnacionales más empresas locales orientadas a la extracción de materias primas no agropecuarias. 

En definitiva, los economistas bonaerenses alertan que La Libertad Avanza promueve un proceso más amplio de subordinación que, de concretarse, implicaría la pérdida total de autonomía de la República Argentina. "En su intención de refundar el país, la administración de Milei aspira, además, a liquidar definitivamente el rol del Estado como distribuidor social y regulador de mercados. Eso instalaría al mercado como único asignador de recursos de la economía argentina", alertan.