El lunes fue caótico en Casa Rosada: antes de subirse a un avión que lo llevó a Estados Unidos, el Presidente Javier Milei decidió expulsar a Nicolás Posse de la jefatura de gabinete y poner en su lugar a Guillermo Francos. Más allá del terremoto, y ya sin el mandatario en suelo argentino, el gobierno arrancó el martes intentando demostrar que tiene todo "bajo control". Francos encabezó por la mañana una reunión de gabinete --y luego fue a desayunar con los ministros a un bar a una cuadra de Casa Rosada-- y, tras esa foto, se dirigió al Congreso de la Nación. Allí tenía planificado un encuentro con la vicepresidenta, Victoria Villarruel, y con distintos presidentes de bloque. La novedad fue que también participó de la reunión José Rolandi, que era el número dos de Posse en la Jefatura de ministros, y que seguirá formando parte del Gobierno. En ese encuentro, el oficialismo presentó una especie de borrador de dictamen, que terminó de delinear con las correcciones pertinentes, y esperan este miércoles lograr juntar las firmas necesarias para tenerlo. En ese cronograma, la semana que viene se podría votar en el recinto. Sin embargo, no son pocos los que en el Senado aseguran que el oficialismo aún no tiene los números necesarios.

Francos salió de la reunión en la Cámara Alta con cierto optimismo: "Hay un dictamen de comisión que se va a circular, en el que hay acuerdos aparentemente suficientes como para aprobarlo”, dijo y añadió que “venimos teniendo reuniones, hubo encuentros en las que se han tomado muchos puntos que plantearon los senadores, muchos puntos que fueron planteados también por las distintas entidades que vinieron al Senado durante todo este mes. Y me parece que hemos llegado a una posición ya avanzado el periodo de tratamiento, con bastante consenso como para emitir dictamen”. Más allá de eso, aclaró que “nunca es posible encontrar coincidencias totales”, y en su entorno agregaron que esperan tener resuelto el tema antes del fin de semana. 

En la reunión estuvieron, además de Francos, Villarruel y Rolandi, la secretaria de Planeamiento Estratégico Normativo, María Ibarzabal Murphy --cercana a Santiago Caputo--; el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala; los senadores Ezequiel Atauche (LLA), Juan Carlos Romero (Cambio Federal), Carlos Arce (Frente Renovador de La Concordia Social), Carlos Espínola (Unidad Federal), Luis Juez (PRO), Eduardo Vischi (UCR) y el secretario parlamentario Agustín Giustiniani.

Abdala, al finalizar el encuentro, expresó que "se aceptaron muchas sugerencias", que algunas de ellas fueron consideradas y otras no, pero que "de todas maneras el eje central de la ley sigue intacto y no se ha sufrido una carnicería ni un desguace de la ley". Las modificaciones estarían centradas en cambios en las facultades delegadas para que no se puedan eliminar ciertos organismos, también en la reforma laboral y en el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI), entre otras. Los puntos en los que habría mayor conflicto son, por ejemplo, el de privatizaciones (algunos senadores quieren eliminar a Aerolíneas Argentinas y al Correo de la lista), y también en la vuelta de la cuarta categoría del impuesto a las ganancias, que quieren eliminar los patagónicos.

Francos aclaró que la privatización de Aerolíneas Argentinas y del correo "están previstas en el dictamen", pero que "habrá que ver si los senadores en las aproximaciones finales lo acuerdan o no lo acuerdan". Uno de los senadores de LLA opinó que el tema de Aerolíneas Argentinas "se va a definir en el minuto 90 del partido, pero todo es posible". Desde la UCR añadieron que los que se oponen a la privatización de la aerolínea de bandera son "uno o dos senadores", entre ellos, Pablo Blanco. 

Otro de los senadores que participó del encuentro explicó a este diario que para él la discusión "está agotada", y que esta semana se conocerá el destino de los proyectos ya sea "por sí o por no". Si bien Francos se fue del palacio legislativo antes de que termine la reunión --no se quedó para escuchar el pedido de más modificaciones porque desde Casa Rosada no estarían dispuestos a seguir "deshilachando" la ley-- Rolandi e ibarzabal sí permanecieron y, una vez terminado el encuentro, siguieron por largas horas recorriendo los despachos de los senadores que están en duda. La Libertad Avanza todavía no tiene asegurados los números. 

El oficialismo necesita conseguir dos dictámenes: uno para la ley bases y otro para el paquete fiscal. El primer proyecto está en las comisiones de Legislación General; Presupuesto y Hacienda; y Asuntos Constitucionales y el paquete fiscal solo en presupuesto y hacienda. Hacienda tiene 17 integrantes: diez del oficialismo y la oposición amigable y el resto de UxP, al igual que Legislación general, mientras que asuntos constitucionales tiene diecinueve integrantes, once del oficialismo y la oposición amigable y ocho de UxP. 

Algunos de los que están en duda, por estas horas, son Guadalupe Tagliaferri (Pro), Martín Lousteau (UCR); el santacruceño José María Carambia y Edgardo Kueider de Unidad Federal. Carlos "Camau" Espínola también tiene objeciones y estuvo este martes en la reunión con Villarruel y Francos. Él no se retiró conforme del encuentro, porque cree que no se tuvieron en cuenta varios de los reclamos de su compañero Kueider.