Mientras en el país hay cambios de Gabinete, debate sobre el dictamen de la Ley Bases, desabastecimiento de gas, protestas en Olivos por la desregulación que alcanzaría a las personas con discapacidad y una cautelar incumplida por la entrega de alimentos; el presidente Javier Milei dio una charla en el Instituto Hoover de la Universidad de Stanford para inaugurar su quinto viaje a Estados Unidos desde que fue electo presidente en busca de inversiones que aún no aparecen. Milei volvió a elogiar el rol de los monopolios en la economía en la previa de reunirse con Sundar Pichai, CEO de Google, y Timothy Cook, Director Ejecutivo de Apple.
En el Instituto Hoover, Milei fue recibido por su directora Condoleezza Rice, la ex secretaria de Estado durante la presidencia de George Bush y dama de hierro de la invasión norteamericana a Irak. "Espero que pueda volver", le agradeció Rice a Milei tras su disertación, seguida de una foto de protocolo a la que se sumó el embajador argentino en Estados Unidos, Gerardo Werthein. El presidente la invitó a pasar por la Argentina, "sería un honor", le dijo en otro punto de conexión menemista de relaciones carnales.
El discurso de Milei fue una reiteración de su análisis sobre los monopolios y el enfoque "erróneo" de la economía neoclásica, algo similar a lo que dijo en su visita a la presentación que hizo ante la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC) en febrero, en su primer viaje a Estados Unidos como presidente; y en abril en la Universidad Internacional de Florida (FIU); en su segundo viaje territorio norteamericano.
Milei no solo planteó las bondades de la competencia entre empresas como motor del avance de la humanidad sino que también ensayó una explicación sobre formación de precios, mientras la inflación en el país acumula más de 65 por ciento en solo cuatro meses: "El sistema de precios es un mecanismo de transición de información de coordinación y de ajuste", sostuvo y agregó que si "el Estado interfiere el derecho de propiedad" la señal de ese sistema "empieza a tener ruido".
Sobre las bondades de las competencias entre monopolios, Milei dejó de lado los millones de dólares que empresas como Google recibieron de fondos públicos para desarrollar su tecnología, como lo mostró la economista italiana Mariana Mazzucato; mientras que en la teoría de precios la gestión de Milei ya demostró sus fallas en la intervención en los precios de las empresas de medicina prepaga, a las que el Estado debió hacer retrotraer tarifas por abuso de posición dominante.
Pero el objetivo de Milei, como ocurrió en su tercer viaje a Estados Unidos para participar del Foro del Instituto Milken --dirigido por el empresario Michel Milken--, es ir en busca de inversiones. Para eso se reunió con los empresarios de Silicon Valley como el CEO de Google y el Director Ejecutivo de Apple. Y también tiene una agenda un encuentro con el creador de Facebook, Mark Zuckerberg. La propuesta de Milei será vender a la Argentina como una tierra libre de trabas impositivas para construir un nuevo polo tecnológico e inteligencia artificial.
Milei le hizo esa misma propuesta a Sam Altman, Ceo de OpenIA empresa detrás del ChatGPT. "Una maravillosa reunión sobre AI y las enormes posibilidades que brinda una Argentina libertaria", comentó Milei en un posteo en sus redes sociales. Tras la reunión con los CEO de Google y Apple, la comitiva tenía otro reunión agendada con otros 30 empresarios del sector.
El jefe de Estado, según se informó oficialmente, también mantuvo una charla telefónica con el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, con quien se encontrará en junio durante la cumbre del G7 en Italia, donde fue invitado por la conservadora italiana Giorgia Meloni. Los temas de la agenda con Canadá son, como de costumbre con la Argentina, los intereses en ampliar la explotación minera; que la Ley Bases busca entregar a los capitales extranjeros con el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (RIGI).