El Gobierno de España oficializó este miércoles, tras las críticas del presidente Javier Milei al mandatario español Pedro Sánchez y a su esposa María Begoña Gómez, el cese de María Jesús Alonso Jiménez como embajadora en Buenos Aires, a través de un decreto publicado en el Boletín Oficial del Estado, que lleva la firma del Rey Felipe VI y del canciller español José Manuel Albares Bueno.

"A propuesta del Ministro de Asuntos Exteriores, la Unión Europea y Cooperación, y previa deliberación del Consejo de Ministros en su reunión del día 28 de mayo de 2024, vengo en disponer el cese de doña María Jesús Alonso Jiménez como embajadora de España en la República Argentina, agradeciéndole los servicios prestados", dice el decreto. 

A partir de ahora, la representación diplomática de España en Argentina queda reducida a un encargado de negocios “ad interim”.

Conflicto con España

El conflicto entre Argentina y España que derivó en el cese de Alonso Jiménez como embajadora comenzó hace casi un mes, cuando el ministro de Transportes español, Oscar Puente, acusó a Milei de “ingerir sustancias”, declaraciones que el gobierno de Argentina respondió a través de un comunicado en el que no solo criticó a Puente sino también al presidente español, Pedro Sánchez.

Con los días, las tensiones fueron escalando: Milei decidió profundizar sus críticas hacia Sánchez -en varias entrevistas lo trató de “cobarde” y “totalitario” al creerse “dueño del Estado”-, y hacia su mujer, Begoña Gómez.

El 21 de mayo, después de que Milei llamara "corrupta" a Begoña Gómez durante un cónclave de Vox del que participó durante su viaje a Españael Ministerio de Exteriores español llamó a consultas a su embajadora en Argentina. Días después, como el líder de La Liberad Avanza no ofreció disculpa alguna, el gobierno de Sánchez tomó la decisión de retirar a la embajadora de manera definitiva.

La semana pasada, Sánchez justificó la decisión de retirar a Alonso Jiménez de la sede en Buenos Aires. “Es una práctica de las relaciones diplomáticas como acto de protesta formal”, sostuvo en una exposición ante el Congreso español, y aseguró: “Lejos de rectificar, Milei se ratifica en el insulto”.

“Nuestro sentimiento fraternal al pueblo argentino, los que conviven con nosotros, y las relaciones económicas, culturales, académicas, van a ser siempre una prioridad para nuestro gobierno, lo ha sido desde el primer minuto. Es cierto que entre gobiernos los afectos son libres, este gobierno no tiene nada que ver con el gobierno de Milei. Los afectos son libres, pero el respeto no, es irrenunciable, y por encima de las ideologías están la educación y el patriotismo”, planteó el mandatario español en aquel momento.

Por su lado, la alcaldesa de Madrid y dirigente opositora, Isabel Díaz Ayuso, defendió a Milei y aseguró que desde el Partido Obrero Socialista Español (PSOE) “lo han difamado y no han respetado la democracia”.

"No existen precedentes"

La decisión del gobierno español se tomó después de que Milei realizara una entrevista en la televisión argentina en la que, en vez de pedir disculpas, llamó "cobarde" a Sánchez por esconderse detrás de "mujeres". La portavoz del Ejecutivo, Pilar Alegría, señaló que "en el siglo XXI la política no es una cuestión de faldas o pantalones, es una cuestión de respeto. Que las mujeres tengamos voz no es de cobardes, es feminismo".

Esa entrevista, explican desde el Ejecutivo, habría sido uno de los elementos a tener en cuenta para tomar la decisión de retirar a la embajadora española en Argentina de manera definitiva. "No existen precedentes de un jefe de Estado que acuda a la capital de otro país a insultar a las instituciones. Nosotros habíamos ofrecido de buena fe toda la hospitalidad que merece la figura de la Presidencia de la República Argentina. Este es un caso único en la historia de las relaciones internacionales", dijo Albares.

En el Ministerio de Asuntos Exteriores no descartan que puedan llegar a impedir la próxima visita oficial de Milei a España (que la Casa Rosada prevé para el 21 de junio) e, incluso, la posibilidad de declarar al presidente argentino persona non grata. "Lo vamos a ver todo", dijeron en este sentido desde la cartera dirigida por Albares, aunque también insistieron en que "es muy pronto para eso y quedan muchos pasos".