El reciente anuncio del aumento de los sueldos de los senadores generó un fuerte rechazo social, en medio de un escenario de ajuste y recesión económica. Según lo informado, los senadores pasarán a cobrar ocho millones de pesos en bruto, más del doble de lo percibido hasta el momento.
El Senado volvió a estar en el centro de la controversia luego de aprobar un nuevo aumento de sueldos para los senadores en medio de una difícil situación económica. Este incremento, que eleva sus ingresos a más de $8 millones brutos mensuales, generó indignación y críticas en la opinión pública.
Este aumento del 9,13%, otorgado a la Asociación del Personal Legislativo (APL), representa un golpe para muchos ciudadanos que están sintiendo el peso de la crisis económica en sus bolsillos.
La cifra fue pactada en la negociación salarial de abril (2%) y mayo (7%), medida que se concretó luego de la aprobación del proyecto que presentó el senador Juan Carlos Romero (Salta), de Cambio Federal, y que fue votado en el recinto sin debate y a mano alzada, el pasado 18 de abril.
El texto incluyó una maniobra para saltear la resolución conjunta que firmaron la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem.
Qué dice el proyecto sancionado que determinó el aumento a senadores
"Percibirán un total de 13 Dietas anuales y cada una de las mismas será equivalente a 2.500 módulos, más un adicional de 1.000 módulos por Gastos de Representación y 500 módulos de adicional por Desarraigo", detalla el proyecto sancionado. Asimismo, indica que "el valor del módulo será el equivalente al que perciben los empleados legislativos de conformidad con las previsiones de la Ley N° 24.600", especifica el artículo 1.
Se trata de la legislación del estatuto y escalafón para el personal del Congreso de la Nación. Así, los senadores tendrán una actualización de la dieta a través de los gastos de representación y por desarraigo al engancharse a la paritaria de los empleados legislativos.
Según se informó, los senadores percibirán desde el próximo mes una retribución mensual de $8.000.000 brutos, lo que equivale a más de $5.000.000 en mano.
En medio de este escenario, las autoridades del Senado defendieron "la actualización salarial" argumentando que los sueldos de los senadores están ligados a la paritaria de los estatales. Sin embargo, esta explicación no fue suficiente para calmar las críticas y el malestar de la población.