El ministro de Finanzas, Luis Caputo, quedó involucrado como ex administrador en una red de sociedades offshore, en el marco de una nueva megafiltración global de documentos conocida como Paradise Papers. La información –que proviene mayormente de Appleby, un estudio de abogados especializado en crear offshores, y de Asiaciti Trust, entre otras fuentes– generó un nuevo tembladeral mundial: involucró a la reina Isabel del Reino Unido; al secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, entre otras 120 figuras internacionales. En su defensa, Caputo aseguró que se desvinculó de los fondos en los que aparece señalado –y que no figuran en su declaración jurada– antes de ingresar en la función pública y juró que no existe conflicto de intereses.
El nuevo escándalo internacional involucra a figuras a nivel global e implica el análisis de 13,4 millones de documentos (más de 1.4 terabyte de información) que coordinaron el Consorcio Internacional de Periodismo de Investigación (ICIJ) y el diario alemán Süddeutsche Zeitung (en la Argentina incluyó a La Nación y Perfil), los mismos que motorizaron los Panama Papers, que involucraron al presidente Mauricio Macri en dos offshore en Panamá y las Islas Bahamas. El Poder Judicial argentino se ocupó de sobreseer al Presidente en diversas instancias. En este nuevo caso, la principal fuente de información es el estudio Appleby, fundado en Bermudas y con sedes en las Islas Caiman, Shangay, Hong Kong y otras ciudades.
Según publicaron los medios que formaron parte del trabajo de investigación de la ICIJ desde el año pasado, uno de los involucrados en la nueva filtración es el ministro de Finanzas argentino. Caputo fue el administrador de Noctua Partners LLC, una gerenciadora de fondos de inversión de Miami con actividad en las guaridas fiscales de las Islas Caimán y de Delaware. Noctua tiene como subsidiaria a Noctua Asset Management LLC, de Delaware, que es a su vez la controlante de Alto Global Fund. Caputo también manejó este último fondo, Alto Global, inscripto en las Islas Caimán el 3 de julio de 2009, que administraba inversiones de riesgo por más de 100 millones de dólares (se trata de un fondo en el que se exigía una inversión mínima de un millón de dólares para ingresar). Estas empresas se ramifican mediante un esquema de cajas chinas con otras llamadas Argentina Fund LTD y Argentina Master Fund. Las últimas operaron en territorio nacional junto con Alto Global y se radicaron en la calle Martha Lynch 489. En esta red de offshores crearon también el 6 de mayo del 2009 la firma Noctua International WMG, registrada también en Delaware, y Lacrosse Global Fund Services, que en la Argentina fue registrada como Lacrosse Global Fund Services Argentina SRL, con domicilio en Alem 928 piso 7. El financista argentino Martín Guyot, radicado en Miami, figuró como su CEO y Caputo como su “Jefe de Inversiones”. Guyot aparece como su socio en las distintas sociedades. Según Caputo, no se hablan hace dos años.
El ministro de Finanzas se defendió ante los medios locales que publicaron la filtración: “No hay ningún conflicto de interés, hoy no tengo nada que ver ni con Axis ni con Noctua. Es más, hoy desfavorezco a mis ex socios, en lugar de favorecerlos. Ningún fondo que haya litigado contra la Argentina estuvo vinculado a Noctua, no lo creo. Pero la verdad es que no lo sé. Si fuera así, me trago este teléfono y me tiro por la ventana”, aseguró Caputo ante los medios que publicaron la investigación. También dijo que renunció a ambos fondos en diciembre de 2015, previo a la negociación que condujo con los fondos buitre, donde se les pagó la totalidad de lo que reclamaban.
Ninguno de los fondos figura en su declaración jurada. Caputo aseguró que es porque no fue accionista de los fondos (“hasta donde yo sé”, aclaró), sino un “asesor financiero” para “friends and family” (no descartó que algún familiar suyo aparezca entre los que invirtieron en esos fondos). Y dijo que los honorarios que recibió por esa actividad se canalizaron a través de una empresa argentina llamada LC y que fueron declarados ante la AFIP como ingresos de cuarta categoría y pagó los impuestos correspondientes cuando los ingresó al país y los cambió al tipo de cambio oficial. No se aclaró, en tanto, si los fondos que controlaban cumplían con las mismas normas ante la Argentina ni tampoco de qué manera manejaron a sus clientes en relación con la restricción a la adquisición de dólares desde 2011.
Entre las firmas que aparecen afiliadas al fondo Noctua está Axis, la inversora que creó Caputo en 2012 junto a Carlos Planas, Alejandro Abergcobo y Fernando Iribarne (este último, vinculado a Noctua) y de la que también se desvinculó en 2015, días antes de asumir como funcionario. No obstante, Caputo fue denunciado porque el Fondo de Garantía de Sustentabilidad de la Anses hizo colocaciones a través de Axis por 500 millones de pesos.
La filtración llega en un momento sensible para la Argentina, cuando acaba de culminar en Buenos Aires una ronda de los países asociados al GAFI en América Latina para discutir estrategias contra el lavado de dinero y el país está por presidir en 2018 el G-20, que mantiene una política para terminar con la opacidad de las guaridas fiscales. En 2016, los países miembro le pidieron a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) un listado de los territorios que no cooperan en transparentar sus sistemas financieros para evaluar sanciones.