La Corte Suprema de Justicia de la Nación dejó firme la condena a prisión perpetua para Leonardo Jara Navarrete, uno de los tres condenados por el homicidio de la niña de 11 años Candela Sol Rodríguez, en agosto de 2011.

Jara Navarrete fue condenado a prisión perpetua en el primer juicio que se realizó por el crimen por ser coautor del delito de privación ilegítima de la libertad seguida de muerte -hubo un segundo juicio, para juzgar a los coautores intelectuales-, decisión que fue ratificada en 2020 por el tribunal de Casación bonaerense.

Luego, la Suprema Corte bonaerense rechazó revisar la sentencia, por lo que la defensa del condenado recurrió en "queja" ante la Corte Suprema federal.

El 26 de abril pasado, finalmente, la defensa presentó un escrito en el que hizo saber la voluntad de "desistir del recurso de queja interpuesto".

Ahora, la Corte Suprema de Justicia de la Nación, por unanimidad, tuvo por "desistida" la última apelación y, de esa manera, la condena quedó con fuerza de "cosa juzgada".

Candela Sol Rodríguez, de 11 años, fue secuestrada y asesinada en agosto de 2011 en Hurlingham, Provincia de Buenos Aires. Su cuerpo apareció dentro de una bolsa de basura, con signos de asfixia, al costado de la colectora de la Autopista del Oeste, a 30 cuadras de su casa.

En el primer juicio que tuvo el crimen, además de Jara Navarrete fueron condenados Hugo Bermúdez, a perpetua, y Fabián Gómez, a cuatro años de prisión. En el caso de Gómez, la condena fue por ser "partícipe secundario de privación ilegítima de la libertad", pero se determinó que continúe en libertad hasta que el fallo quede firme.

En el segundo juicio que tuvo el crimen, que se realizó a principios de mayo, fueron absueltos el jefe narco Miguel Ángel "Mameluco" Villalba -quien cumple con una condena por narcotráfico-, el ex policía bonaerense Sergio Fabián Chazarreta, el informante de las fuerzas de seguridad Héctor Horacio "Topo" Moreira, y el carpintero Néstor Ramón Altamirano, quienes llegaron como acusados de ser coautores intelectuales del asesinato de la niña.

El origen de la tragedia


El secuestro se inició cerca de las 15.30 del 22 de agosto de 2011 en la esquina de la casa en la que vivía Candela en el partido de Hurlingham. Ese día ella planeaba encontrarse con amigas de su grupo de Scouts, aunque mientras las esperaba parada en la esquina fue abordada por al menos tres personas, que la ingresaron por la fuerza a una camioneta Ford EcoSport negra cuya patente trasera estaba cubierta, y se la llevaron hasta una vivienda de Loma Hermosa, partido de Tres de Febrero.

La madrugada del 29 de agosto, ante un inminente allanamiento policial, Candela fue llevada hasta otro domicilio en Kiernan 992 de Villa Tesei, donde se cree que, entre la noche de ese día y la mañana del 30, fue abusada y asfixiada por el ya condenado Bermúdez. De la pesquisa surgió que el cuerpo de la víctima fue lavado para ocultar rastros antes de ser abandonado en una bolsa de consorcio arrojada a la vera de la Autopista del Oeste, también en Hurlingham.