"El gobierno (nacional) está parado", aseguró el gobernador Gustavo Saénz al reclamar nuevamente por la quita de fondos por parte de la Nación a las provincias y la suspensión de obras públicas, incluso aquellas que cuentan con financiamiento internacional.
"Noto, lamentablemente, mucha soberbia en el gobierno. También noto un desprecio, si ese es el término, hacia el interior del país. Y lo noto en hechos y en actitudes que son claras", por ejemplo: "intempestivamente cortarles el fondo compensador del transporte a todas las provincias de un día para el otro sin avisarles, y no hacerlo para el AMBA, claramente demuestra que hay una diferencia para con el interior del país”, aseguró Saénz.
En una entrevista en el programa Cara a Cara, que conduce el periodista Mario Peña, el gobernador salteño llegó a cuestionarse el acompañamiento que hasta ahora ofreció al gobierno de Javier Milei. "Es muy triste lo que estamos pasando" porque la Nación no reconoce las administraciones ordenadas, como la de Salta, que no tuvo déficit fiscal, y "eso nos hace preguntarnos de qué sirve acompañar o no acompañar, si en definitiva nos tratan a todos de la misma manera", aseguró.
También es muy triste, dijo "tener que pensar que hay que acompañar para que te den lo que te corresponde, porque en definitiva no deja de ser una forma extorsiva de llevar adelante la política”.
"Gobernar es difícil, y en esta situación, peor", dijo el gobernador al comenzar la entrevista, en la que se pronunció con dureza sobre el gobierno de La Libertad Avanza. Enumeró las dificultades de los últimos cuatro años, con la pandemia, la sequía, la crisis económica, la guerra, "y ahora un gobierno difícil", si bien fue elegido por el electorado.
En esa línea recordó que en la gestión anterior la provincia había logrado "una cantidad de obras importantes el crecimiento de Salta”. “Lamentablemente, de un día para el otro, intempestivamente se han cortado los fondos para las provincias”, agregó.
"Me parece también muy caprichoso por parte del Estado nacional dejar de lado obras que entendemos son importantes”, más allá de que entienda la situación económica, insistió. Sobre este aspecto, contó que la provincia busca certezas de parte del gobierno central, que al menos informe qué y cuántas obras se llevarán adelante. De paso, recordó que hay obras que cuentan con financiamiento internacional, por lo que no habría razón para paralizarlas, como ocurre con la planta depuradora de la zona sur.
“Evidentemente, el gobierno nacional tiene una mirada centralista", siguió, aunque aclaró que esto ocurrió "con todos los gobiernos”.
Y así como reconoció que Milei tiene la legitimidad de haber sido elegido por la mayoría del electorado, recordó que también los gobernadores fueron electos. “También tenemos la obligación de gobernar”, la gran diferencia es que los gobernadores “no acordamos con el Fondo Monetario Internacional semejante deuda. Los gobernadores no evaluamos”, “no emitimos billetes, no renegociamos la deuda con el FMI. Los gobernadores no tenemos la culpa del déficit fiscal nacional. Esto es querer mostrar a los gobiernos provinciales como que son los causantes de la situación que hoy vive la Nación y esto no es así”, agregó.
Tras afirmar que el gobierno nacional "está parado", dijo que espera que se supere la discusión de la Ley de Bases, y que se apruebe o no, el gobierno nacional arranque por fin y dé las certezas que las provincias piden.
En este contexto, Sáenz destacó que su convocatoria al Pacto de Güemes es una invitación a la defensa de los intereses de la provincia y la región. En este sentido, ratificó que el norte argentino no crece porque nunca recibió los recursos para ello.