Con principios como oralidad, celeridad y transparencia, hoy comienzan a discutirse en Rosario las bases para la reforma del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación. Luego de las modificaciones al Código en sí mismo, que comenzaron a regir en agosto de 2015, para todos los trámites judiciales relacionados con la vida cotidiana de los ciudadanos, ahora se buscan cambios para la forma de aplicar esa legislación. "A partir del Código nuevo, moderno, revolucionario y novedoso se hace necesario un código de aplicación", dijo el juez penal Carlos Carbone, juez penal y presidente del Ateneo de Estudios del Proceso Civil.
La incumbencia de la justicia civil en la vida de los ciudadanos es prácticamente cotidiana y atraviesa cuestiones de familia, contractuales, de salud y hasta por la compra de un electrodoméstico que no funciona. Los trámites van desde lo más urgentes ‑a través de medidas cautelares y recursos de amparo‑ hasta juicios que pueden llevar años.
Casi como cuando se comenzó a discutir la reforma del Código Procesal Penal que trajo la oralidad y publicidad de los actos procesales como lo más visible del cambio; ahora se busca algo similar con los casos del fuero Civil y Comercial.
Hoy en día, abogados hablan de que muchas veces las audiencias se hacen sin funcionarios y los jueces fallan sin conocer a las partes, porque lo hacen a partir de los elementos del expediente. Sin embargo, surge el planteo de si todos los casos serán trasladables a la oralidad, por una cuestión de tiempo y recursos. En lo Penal, los fiscales son quienes deciden qué causas llegan a juicio; mientras que en lo Civil y Comercial hay numerosos actores: "Si hay 3 mil causas, serán 3 mil actores", ejemplificó Carbone. Sin embargo, la posibilidad de llevar a la oralidad las cuestiones más urgentes, aparece como una opción. "En Alemania por ejemplo, no están prefijados los extremos que requieren de oralidad, sino que hay jueces que deciden", ejemplificó.
Carbone detalló que "hay muchas cosas para discutir, porque el proceso civil involucra a la mayoría de las personas. Es la trama del derecho que más afecta y está al alcance de la gente, y parecía olvidado. Por eso celebramos que se haya elegido Rosario para empezar a analizar esta reforma".
La actividad se realizará a partir de las 18 en la Universidad Católica Argentina (UCA), de Pellegrini 3314, a la que podrán asistir abogados y estudiantes de derecho, pero también el público interesado.
La reforma consiste básicamente en la pretensión de "instalar la oralidad", dijo Carbone. "Esto llegará a todas las provincias y creemos que tiene que repercutir en la reforma que se está planteando para Santa Fe", señaló. Y agregó: "Se busca una tutela judicial efectiva, hacer procedimientos más cortos, tener un juez que se comprometa más con la investigación de la verdad y suprimir los abusos procesales, chicanas y demoras".
Para el magistrado, es una cuestión democrática y se eligió Rosario porque hay una escuela de derecho procesal civil que tiene más de 20 años, con el doctor Jorge Peyrano, que viene trabajando hace tiempo por todos estos valores, que consisten en "un sistema judicial efectivo, que se acerque más a la gente y que llegue mucho más rápido de lo que está llegando ahora".