Si alguien pretendiera hacer la historia de las novelas eróticas, no podría soslayar al escritor Pierre Louÿs, considerado uno de los más notables “escritores pornográficos” en la historia de la literatura.
Nacido en Bélgica en 1870, muy joven se fue a vivir a Francia. A los 24 años traduce “Bilitis”, obra de una poeta de la antigua Grecia, contemporánea de Safo. Los versos son la expresión del amor lésbico. Después escribe su primera novela, “Afrodita”, un relato de estilo decadente que es durante un largo tiempo en el libro más vendido de Francia. Es una descripción ajustada de la vida cortesana en Alejandría, con finos toques de erotismo y sensualidad.
Sin embargo es sin dudas “La mujer y el pelele” su obra más notable. Ambientada en Sevilla a finales del siglo XIX, cuenta la historia de una joven cigarrera que trabaja en la fábrica de tabacos. Se llama Conchita Pérez y con sus encantos y belleza enamora a Don Mateo, un hombre rico. Conchita, en el pleno uso de su libertad, decide con quién acostarse. Para la época, una revolución. Los mil cortejos de Don Mateo se desvanecen ante la negativa de Conchita. Sin embargo aprovecha para, lenta pero persistentemente, ir sacándole parte de su riqueza. Algunos sostienen que Conchita es la expresión de la “femme fatale”. No parece ser el caso de Conchita, aunque con cierta perversión siempre deja la puerta entreabierta, provocando sobre Don Mateo, el pelele, un control pleno, diríamos enfermizo.
Veamos algunos párrafos de la obra: “Su obstinación en seducirme y en rechazarme, esas intrigas que duraban ya desde hacía un año, y que se repetían en el preciso momento en que yo esperaba el desenlace, conseguían exasperar mi más paciente ternura
-Pequeña -le dije- estás jugando conmigo. Ten cuidado, no vaya a cansarme.
-¿Ah, sí? Pues entonces hoy tampoco le amaré, don Mateo. Hasta mañana.
-Ya no volveré.
-Volverá usted mañana.”
Dejamos a los lectores en la búsqueda de si Don mateo pudo consumar su pasión ¿Qué se imaginan?
La obstinación de Don Mateo me lleva a pensar en otra personaje: si Milei no se habrá obstinado, como el pelele, con la dolarización. ¿Será también un amor enfermizo no consumado?
Hay que ver los distintos cortejos de Milei para poseer, no a Conchita Pérez sino a Lady Dolarización. En el transcurso de la campaña uno de los ejes, aunque sin mayores precisiones. Sin embargo, en su libro “El Fin de la Inflación” Milei comienza a precisar el cortejo y las insinuaciones amorosas sobre su Lady. En la página 144 nos dice que prevé una situación de alta inflación, por lo que sugiere una modificación en el sistema bancario que adopte la llamada Banca Simons. En ésta, las entidades bancarias solo pueden tomar depósitos en activos de alta liquidez, sin posibilidad de entregarlos como préstamo al sector privado. Es una especie de “caja de seguridad”. Después se podrá pasar a un sistema de banca libre, con eliminación del BCRA. Estima este proceso en 36 meses.
Sin embargo. en la página 161 dice que “la realidad es que estamos proponiendo una reforma monetaria que termine con el Banco Central, ya sea en la versión de Emilio Ocampo (Banca offshore sin ningún formato predeterminado) o con la nuestra (Banca offshore en un Sistema Simons). La de Emilio tiene la ventaja de que se puede hacer mucho más rápido. La nuestra es más purista pero demanda más tiempo y eso en política puede ser absolutamente diferente. Por eso estamos convencidos de adoptar su propuesta”. Taxativamente, Milei cambia su estrategia de seducción hacia su Lady.
Ahora vamos por la propuesta. Emilio Ocampo junto a Nicolás Cachanosky en “Dolarización, una solución para la Argentina” plantean que previo a la dolarización es necesario resolver la demanda cuasi fiscal del BCRA, que estiman en 30.000 millones de dólares. Proponen que tal deuda sea honrada con un bono de deuda bajo legislación extranjera que “reemplazaría” la deuda del BCRA. Para hacer más atractivo dicho bono, se les ocurre garantizarlo con el Fondo de Garantía y Sustentabilidad de la ANSES y con YPF. Es decir, que la Argentina contraiga una nueva deuda, para cubrir otra deuda… El pequeño detalle que parece no tenerse en cuenta es que, como la deuda cotiza a un cuarto de su valor nominal, la deuda a contraer para recibir 30.000 debería ser 120.000 millones de dólares. Es decir, 2,6 veces más que la deuda tomada por Mauricio Macri.
Sin bien Ocampo se fue eyectado, es cierto que parte del cortejo propuesto se lleva adelante. ¿Por qué? Como en un pase de magia, se transfiere la deuda del BCRA al Tesoro nacional. Como dice Walter Graziano en “El Mago, Luis Caputo y el conejo muerto: Nada por aquí, nada por allá”, en Ámbito Financiero de mayo, “en el intento de reducir los pasivos monetarios del BCRA, el mago consiguió colocar nada menos que 11,7 billones de pesos de un solo golpe en Letras y Bonos del Tesoro". Y agrega: “El Estado mantiene su nivel de deuda intacto -sin reducirse un solo peso- con respecto al día previo a la licitación ¿Y el déficit? Bueno el déficit en realidad sube. Sube porque mientras el BCRA paga alrededor de 3,3 mensual por sus pases, el Tesoro paga 4,5 mensual por sus Letras. Vale decir que el ya famoso déficit cuasi-fiscal bien medido con el Tesoro, sube en vez de bajar”.
Ahora, sea cual sea la estrategia para consumar su pasión por la Lady, Milei necesita conseguir una considerable suma de millones de dólares. Oscila entre los 30.000 de Ocampo-Cachanosky, a los 15/20.000 que estima el Messi de las finanzas. Sin embargo el amor no se consuma, porque de los innumerables viajes al gran país del norte no se consiguió un solo dólar y el FMI sigue sin aflojar. La pregunta es: ¿la dolarización es el camino que debe seguir la Argentina? Vamos a analizar miradas desde distintas referencias.
Pablo Gerchunoff, notable economista radical, en “Argentina en el callejón” nos dice que “la primera es que no están los dólares ni las destrezas gubernativas para llevar un proyecto de semejante envergadura y mientras sea así, insistir con la dolarización retarda el fortalecimiento de una moneda nacional en un programa de estabilización menos aventurado”. Recuerda que la dolarización, con la eliminación de funciones del BCRA, provocará que “el propio Milton Friedman, un favorito de Milei, se arrancara los cabellos. Él sabía que la ausencia de política monetaria es también un problema productivo y un problema de empleo”.
Michael Roberts, marxista británico, en “Elecciones en Argentina ¿Del Peso al Dólar?”, dice que la dolarización deja la política monetaria en manos de la Reserva Federal de EEUU, y así quedan expuestos los países que dolarizan a “una economía dolarizada, que debe hundirse con cualquier recesión global. Un dólar estadounidense fuerte significa altos precios de exportación para la Argentina dolarizada, la que la hace menos competitiva en los mercados mundiales”.
Finalmente, Alberto Acosta en “La trampa de la dolarización, mitos y realidades para la reflexión”, va demoliendo los mitos sobre integración al mercado mundial, que bajaría la inflación y las tasas de interés. Concluyendo, la Lady es una trampa para los países que la adoptan.
En el 41 Congreso del Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas se habló de la idea de lo que llaman una “dolarización endógena”, con una competencia de monedas, diciendo que conforme aumente la demanda de dinero, la única forma de monetizar la economía será que los argentinos saquen los dólares del colchón y los metan en la economía. Dejamos para otra oportunidad evaluar la llamada “competencia de monedas”. Pero ahora lo que queda claro es que los dólares para consumar con su Lady, Milei pretende sacarlos de los ahorros de los argentinos. El pelele Don Mateo, en su afán por poseer a Conchita, era cada día más pobre. ¿Pretenderá Milei seguir el mismo camino pero con la nuestra?