El reparto de leche en polvo desde la oficina de un diputado provincial del departamento Capital exhibió que parte de los alimentos enviados por el Ministerio de Capital Humano de la Nación a la provincia están próximos a vencerse. 

Sin embargo, ante la falta de claridad de la información oficial, no se pudo esclarecer si la demora se debió a la provincia, o si los alimentos fueron enviados recientemente por la Nación, ya en medio del escándalo de la retención de alimentos. 

Ayer medios locales dieron a conocer que se estaba repartiendo leche en polvo desde la oficina del diputado Juan José Esteban, ex ministro de Salud de la provincia.

El legislador respondió que efectivamente hizo gestiones ante el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia cuando se enteró que la leche que había llegado tenía fecha próxima de vencimiento.

“Es un producto que está para vencerse el 7 julio”, dijo Esteban en Radio Nacional. Contó que el alimento fue retirado esta semana y ayer ya no había más para repartir. “Lo entregamos en nuestras oficinas porque hay que hacer un llenado administrativo de planillas. No hago ni política ni demagogia al hacerlo”, aseguró el diputado, que también es médico.

Afirmó que trabaja en terreno con un equipo interdisciplinario para poder detectar las necesidades de las familias más vulnerables y el criterio del reparto es en base a la necesidad y cantidad de niños y niñas en cada hogar. “Ayudar no es delinquir”, aseguró. “He visto la oportunidad y lo pedí. Y cualquier diputado lo puede hacer. Yo no voy a dejar de hacer la gestión si puedo”, respondió ante la posibilidad de que se lo pueda señalar como una actitud clientelista.

Al diputado le llegaron 200 cajas de leche “hace dos días”. “Fuimos a retirar al depósito una vez que se autorizó la entrega”, agregó.

“No dejamos vencer ni un solo alimento”

Por su parte, el ministro de Desarrollo Social, Mario Mimessi, afirmó ayer que en su cartera “no dejamos vencer ningún alimento”.

Añadió que si se logró que Capital Humano envíe alimentos a la provincia fue por la gestión y la rendición de los alimentos. “Logramos la provisión de mercaderías para refuerzos alimentarios entre las cuales están las leches”, dijo en declaraciones públicas en las que aclaró: “no podemos decir que (la llegada de estos alimentos) es producto de la polémica a nivel nacional”.

El ministro salió a responder también las afirmaciones del concejal de la Ciudad de Salta, Pablo López, de La Libertad Avanza, que en un intento por defender a la ministra de Capital Humano, Sandra Petovello, acusó a Mimessi de haber dejado vencer mercadería en Tartagal, cuando era intendente. 

“Pido que se chequee lo que se dice. Más cuando es un tema tan sensible”, respondió el funcionario al negar la acusación. “Estoy para gestionar y conseguir recursos para la provincia sacando cualquier tipo de consideración ideológica”, añadió al afirmar que los alimentos que quedan por repartir y fueron enviados por Nación tienen vencimiento en fechas cercanas al 27 de julio.

En cuanto al hecho de que Esteban repartiera leche, aseguró que la posibilidad estaba abierta para todos los legisladores e intendentes que lo gestionen, además de asociaciones civiles como Cáritas o Pata Pila.

Mientras, hasta ayer se desconocía de la llegada de alimentos para el reparto por parte de la intermediaria impuesta por la Nación, la Fundación Conin. Según indicó Teresa Cornejo, referente de Fundación Nutrir (que trabaja con uno de los programas de la entidad liderada por Abel Albino), no recibió novedad alguna de la llegada de estos alimentos.

El cruel juego del hambre

“Vos a los nenes les ves los ojitos y no podés darte el lujo de cerrar el merendero”, dijo ayer con la voz quebrada la titular de un merendero del barrio Solís Pizarro, en el marco de las Jornadas contra el Hambre que se realizaron en distintos puntos del país. “No somos fantasmas. Somos personas. Y esos niñitos nos ven como personas”, afirmó.

Desde General Mosconi, otra encargada de un merendero, afirmó que tuvo que cerrarlo porque no les envían mercadería, y los comercios ya no colaboran por la difícil situación que vive el país. “Es triste, los niños vienen a retirar (la merienda), y tenés que decirles que no hay”, dijo a Salta/12. “Esa era la única comida del día para los chicos”, agregó.

“Hay hasta mercadería navideña que no se repartió ¿Sabés cuantos niños no comieron un solo pan dulce?”, cuestionó. 

Ayer la diputada de San Martín, Gladys Paredes, manifestó su preocupación por la situación de familias “que hace semanas no comen nada de carne”.

Mientras, desde el corte que Política Obrera realizó en el microcentro salteño, Marta Martín advirtió: “están desoyendo el hambre de los barrios”.