El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, llegó el lunes a Israel en el marco de una gira por Medio Oriente para impulsar una tregua en Gaza, escenario desde hace más de ocho meses de una guerra entre el Ejército israelí y Hamas. Tras una primera etapa en Egipto y un encuentro con el presidente Abdel Fatah al Sisi, Blinken llegó al aeropuerto de Tel Aviv desde donde se dirigió a Jerusalén para reunirse con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu. El plan de tregua impulsado por el presidente Joe Biden consiguió la aprobación del Consejo de Seguridad de la ONU.
Una "aplastante mayoría" quiere la paz
En El Cairo, el jefe de la diplomacia estadounidense instó a los países de Medio Oriente a presionar a Hamas para que acepte un alto el fuego. "Creo firmemente en que la aplastante mayoría" de los israelíes y palestinos "quieren creer en un futuro" en el que los pueblos "vivirían en paz y en seguridad", sostuvo Blinken. Su octava visita a esa región desde el inicio de la guerra entre Hamas e Israel busca impulsar el plan de tregua anunciado por Joe Biden.
Un comunicado del Departamento de Estado detalló que en su reunión con el primer ministro israelí, Blinken "reiteró que la propuesta sobre la mesa desbloquearía la posibilidad de calma a lo largo de la frontera norte de Israel y una mayor integración con los países de la región". Además el secretario de Estado "actualizó a Netanyahu sobre los esfuerzos diplomáticos en curso para planificar el período posterior al conflicto".
La visita de Blinken se produce un día después de que el miembro del gabinete de guerra israelí Benny Gantz, renunciara al gobierno tras haber exigido, sin éxito, la adopción de un "plan de acción" para la posguerra en Gaza. Para Gantz la prioridad es la liberación de los rehenes. Netanyahu por su parte asegura que continuará la guerra hasta la destrucción de Hamas, que gobierna la Franja de Gaza desde 2007.
Apoyo de Naciones Unidas
En Nueva York, el Consejo de Seguridad de la ONU adoptó una resolución que apoya la propuesta de un alto el fuego en Gaza. El texto, que contó con 14 votos a favor y la abstención de Rusia, "saluda" la propuesta de tregua y liberación de rehenes anunciada por Biden el 31 de mayo. También llama a Israel y a Hamas a "implementar plenamente sus términos, sin demora y sin condiciones".
El plan del presidente estadounidense contempla en una primera fase un alto el fuego "inmediato y completo", el canje de rehenes por presos palestinos, la retirada del Ejército israelí de las zonas pobladas de Gaza y el ingreso de ayuda humanitaria. Pese al amplio acompañamiento, no queda claro que estos esfuerzos por la paz vayan a prosperar, dadas las divisiones abiertas en el gabinete de Netanyahu.
De acuerdo a la cadena NBC News, Washington se plantea negociar un acuerdo bilateral con Hamas que permita la liberación de los rehenes estadounidenses en Gaza en caso de que las actuales discusiones de cara a un alto el fuego entre Israel y el grupo palestino fracasen. Esa posible nueva negociación, según el medio, no incluiría a Israel y se llevaría a cabo a través de interlocutores qataríes.
Las fuentes de NBC News no pudieron precisar qué ofrecería Washington a Hamas a cambio de los cinco estadounidenses que según la Casa Blanca están en manos de Hamas. El canal de televisión argumenta que un potencial acuerdo entre el Ejecutivo estadounidense y el movimiento islamista palestino podría interesarle a Hamas para incrementar la tensión existente entre Washington y Tel Aviv y aumentar la presión política interna israelí contra Netanyahu.
"El acuerdo es un suicidio colectivo"
El ministro de Finanzas israelí, el colono y extremista Bezalel Smotrich, se enojó este lunes con familiares de los rehenes en la Knesset (Parlamento israelí), a quienes reiteró que no apoyará ningún acuerdo de tregua con Hamas por considerarlo un "suicidio colectivo". "Liberar a cientos de asesinos con las manos manchadas de sangre podría conducir al asesinato de muchos judíos", aseguró Smotrich en referencia al posible canje de cautivos por presos en una tregua.
"Cuando Hamas exige poner el fin de la guerra, mientras sobrevive en Gaza, eso significa que volverá a armarse, cavar túneles, comprar misiles, y que muchos judíos podrán ser asesinados y secuestrados en otro 7 de octubre", agregó Smotrich, poco antes de abandonar con bronca la reunión del Comité de Finanzas. Algunos de los familiares le reprocharon también que, durante estos ocho meses de guerra, no se haya reunido ni una sola vez con ellos.
Otro diputado del partido ultraortodoxo, Judaísmo Unido de la Torá, Yitzhak Pindrus, acusó a la madre del rehén Yagev Buchshtav de intentar politizar la situación para conseguir derrocar a Netanyahu. Pese a que este sábado el Ejército israelí logró rescatar a cuatro rehenes con vida en una operación que causó más de 274 muertos palestinos, la desesperación de los familiares del resto de los cautivos aumenta.
Sobre la Franja de Gaza, la guerra no da tregua. Al menos 40 palestinos perdieron la vida en otra jornada de bombardeos y ataques israelíes,, mientras que otros 218 resultaron heridos, informó el ministerio de Salud del gobierno de Hamas. El número total de muertos aumentó a 37.124 y el de palestinos heridos a 84.712 desde que estalló la guerra el 7 de octubre. Ese día comandos de Hamas lanzaron un ataque sin precedentes en territorio israelí, matando a 1.194 personas según un recuento de la agencia AFP basado en datos oficiales.