El dólar blue subió 15 pesos y terminó en 1280 pesos. A diferencia de esta suba, las cotizaciones de los tipos de cambios operados en la bolsa porteña registraron una disminución. El contado con liquidación retrocedió 0,5 por ciento, para ubicarse en 1306 pesos, mientras que el dólar me bajó 0,8 por ciento y cerró en 1272 pesos la primera jornada de la semana. La autoridad monetaria vendió 27 millones de dólares y las reservas cayeron a 29.297 millones.
Durante las últimas semanas hubo una importante volatilidad en el plano cambiario, que si bien en los informes del mercado lo asocian a elementos de la política en la práctica se debe a la acumulación de problemas en la macroeconomía. Entre algunos de los principales desequilibrios figura la dificultad para hacer bajar la inflación de niveles del 1 por ciento semanal y la dificultad para acumular nuevas reservas internacionales. También que en el próximo año y medio hay elevados pagos de deuda en moneda extranjera.
La brecha entre el dólar blue y el oficial se ubicó en el 41,9 por ciento y se consolidó sobre el 40 por ciento. La cotización ilegal viene de anotar su cuarta suba semanal consecutiva. Con tasas de interés en pesos negativas y una hoja de ruta poco clara de la política económica, desde mayo volvió la especulación sobre una posible devaluación.
Además de los elementos macroeconómicos, los consultores insisten con que una porción del ruido cambiario se vincula al elemento político. Por ejemplo, la vinculada a la media sanción a la modificación de la fórmula jubilatoria, que según el presidente Javier Milei atenta contra el equilibrio fiscal y que en caso de aprobarse, vetará.
En tanto, los inversores, según analistas de la city, se mantienen a la expectativa de lo que ocurrirá con la ley Bases y el paquete fiscal, los cuales se tratarán el próximo miércoles en el Senado. Por ejemplo, un informe de la consultora Portfolio Personal indicó que “esta semana estará cargada de eventos relevantes para los activos locales. Como destacamos en otras oportunidades, si el gobierno logra surfear las trabas legislativas y consigue la aprobación de la Ley de Bases (principal motor de los activos argentinos) podríamos observar una recomposición de las expectativas que frene la sangría en la plaza local”.
Al mismo tiempo, agregó que “más allá de esto, nada está definido por lo que aguardaremos a la evolución de las jornadas para observar cómo se desenvuelve esta crónica”. Por caso, la deuda soberana en dólares arrancó las primeras horas de la semana con una leve tónica negativa. Pero con el correr del lunes, no obstante, los títulos terminaron con rebotes de hasta más del 3 por ciento y con ello el riesgo país cerró en 1488 puntos.
En tanto, las acciones del Merval también registraron un rebote este lunes, con acciones que llegaron a subir en promedio casi 4 por ciento. En la bolsa de Nueva York las firmas argentinas se operaron con una tendencia similar y hubo algunas como Pampa Energía que ganaron hasta 6 por ciento.
Por su parte, más allá de la volatilidad de los activos bursátiles, los analistas del mercado plantean que otro de los inconvenientes hacia adelante para sostener la estabilidad cambiaria tiene que ver con la liquidación del campo. El sector se muestra reticente a vender la cosecha y espera que haya un salto del dólar oficial para poder acelerar las exportaciones.
El reporte de Portfolio Personal indicó que “la oferta de los exportadores sigue manteniéndose en niveles muy bajos a pesar de encontrarnos en el período de alta estacionalidad de la liquidación del agro”. Agregó que “la media móvil de cinco días del volumen operado en contado inmediato en MAE en dólar spot, proxy de la liquidación de los exportadores vía MULC, se desaceleró a 114 millones el viernes, marcando un nuevo mínimo en la gestión Milei”. “Para tomar dimensión de la caída, la oferta se desplomó desde un pico reciente de 320 millones alcanzado el 16/05, apenas dos días después de la última baja de tasas del Banco Central”