En su editorial, el periodista y conductor Víctor Hugo Morales hizo un análisis crítico acerca del panorama político y mediático a menos de 24 horas del debate por la Ley Bases en el Senado.
El editorial de Víctor Hugo Morales
La mafia de Clarín-Magnetto juega aviesamente a favor de la Ley de Bases. Es natural, por otra parte. Magnetto es el capo de la Asociación Empresaria Argentina que procura otra estafa contra el país. Pone en tapa que 13 gobernadores apoyan a la ley y no se sabe ni quiera si es así. Pero aunque lo fuera, es una manija. Es una máquina impresionante que ponen al servicio de que esto salga.
Toda la página es para la ley. Para indecentar a los gobernadores que no acompañan. Como para crear conciencia favorable a la brutalidad del fraude.
Y no importa si el número es discutible, esta vez el desfalco no es al país, es el propio país el desfalcado. Se lo llevan sin el mínimo esfuerzo
No tienen que cinchar en la noche callada y fría como un cartonero que arrastra su carro. No. Se lo llevan mansos. Plin, caja, se lo llevan todo para ellos y sus amigotes internacionales.
Viva el FMI, el pago de la deuda, la pisoteada de Estados Unidos, la entrega, el cipayismo, y la traición. Es una locura. Métale nomás que vamos bien.
Y otro Milei, vaya a saber si encuentran, así que hay que aprovecharlo a este. Y tiene que ser ahora. Y es por acá, como decía Macri.
Como siempre, primero, la cuestión cultural. Hacer creer que algo es bueno o malo, machacar con eso. El Estado es malo, malo, malo hasta que viene un topo y lo desguaza.
Los jubilados son un problema tan grande que se lo hacen creer a los propios jubilados, que ellos son el problema.
Que nosotros somos el problema, hasta que viene el topo que quita las moratorias, les baja los ingresos y que se dejen de embromar si total se van a morir lo mismo.
Tiene gobernadores, como tuvieron diputados tipo De Loredo. Gente que llora su traición como en un tango, pero a los que siempre les marcan el paso.
En eso estamos.