La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, busca eliminar cualquier referencia a la interrupción voluntaria del embarazo de la declaración que se negocia estos días en la cumbre de los líderes del G7 que se realiza en su país, en sintonía con las políticas contra el derecho a decidir que emprendió durante la gestión de su gobierno.
Una fuente conocedora de la negociación señaló este miércoles al diario español El País que fue la presidencia italiana quien quitó la referencia al aborto que había en el primer borrador de declaración final de los líderes y que, al constatar el retroceso en el lenguaje de la declaración, la delegación europea y la francesa reaccionaron y pidieron que se recupere la mención al aborto.
“Estamos ante un claro choque de valores entre los miembros del G7″, dijo a ese medio un alto diplomático europeo que participa en los debates. “Es muy lamentable que se haya debilitado el lenguaje sobre el aborto. Es deber del G7 mostrar liderazgo en la promoción de esos valores, no dar marcha atrás en ellos”, añadió.
Entre las acciones recientes de Meloni contra el derecho a interrumpir el embarazo en su país, se destaca la aprobación en abril de una ley que permite y financia la entrada de asociaciones antiaborto en los consultorios familiares, atacando en definitiva a la Ley 194, que regula el aborto en Italia desde 1978. El Senado dio luz verde a esta medida con 95 votos a favor, 68 en contra y una abstención, dentro del llamado "Decreto PNRR", un texto legislativo que incluye partidas de los fondos europeos del Plan de Recuperación de la pandemia.