El 12 de junio llega la 7ª edición del FINCA, el Festival Internacional de Cine Ambiental con foco en la #JusticiaClimática. Se trata de un evento que invita a descubrir cómo el cine y la narrativa audiovisual pueden potenciar la conciencia y el compromiso con la sostenibilidad ambiental. La cita se desarrollará durante una semana (del 12 al 19 de junio) en distintos espacios de la ciudad de Buenos Aires y también en modalidad online a través de la plataforma Lumiton. 

Es un encuentro gratuito y para participar solo hay que inscribirse previamente en finca.imd.org.ar, donde además está la programación completa. En esta edición se presentarán cincuenta y cinco películas de veintisiete países, que se proyectarán en la Alianza Francesa, el CCK, CNB La Casa, el Centro Cultural San Martín y el Espacio Memoria y Derechos Humanos (CC Conti y Casa por la Identidad, ex ESMA): donde, además, habrá proyecciones especiales para lasescuelas primarias y secundarias, con películas y cortometrajes hechos por y para les jóvenes). 

Se trata de tres competencias oficiales divididas en once secciones temáticas: Justicia Climática, Ecofeminismo, Econciencia y Sostenibilidad, Escuelas, Horizontes Energéticos, Juventud, Madre Tierra, Soberanía Alimentaria, Somos Agua, Finquita (cortometrajes pensados para las infancias) y FICDH-Derechos Humanos). Además de dos secciones especiales: Foco Palestina y Ventana Ecozine (Festival Ecozine de España).

20.000 especies de abejas de Estibaliz Urresola Solaguren.

El Festival también ofrece una formación gratuita sobre Cine Sustentable (el viernes 14 de junio), que buscabrindar experiencias y herramientas para la gestión del impacto ambiental y la sostenibilidad en la industria audiovisual. Habrá premios, una mención que será elegida por el voto del público, performances y una Asamblea Comunitaria (el sábado 15 en el Museo del Hambre), con debates sobre la soberanía alimentaria, el acceso al agua y la transición energética.

Escenas vinculadas al bosque colombiano -el último refugio del aire-, la migración y la tierra boliviana; la piedra volcánica y los drones; la copa menstrual que no se puede lavar porque no hay agua; la minería, la industria del acero y la destrucción; el saber de los Yanomami, Munduruku y Mëbëngökre; el activismo adolescente, la defensa del territorio y la persecución; los derechos territoriales de los inuits, la amenaza de la gentrificación climática sobre los residentes de Liberty City; las aguas contaminadas, las aguas tucumanas, las aguas robadas; los hieleros de Chimborazo, Berta Cáceres y otras ráfagas de un cine que une colores son algunas de las escenas que habitan el catálogo.

Denuncias y las esperanzas de una tierra que es azul como una naranja y dondelas avispas, como en versos eluardianos, florecen de verde.

Más info: https://finca.imd.org.ar