Tras la aprobación en el Senado de la Ley Bases, en el peronismo comenzaron a sacar los trapos al sol. El voto positivo al proyecto insignia de Milei en general o en algunos de sus artículos en particular dejó expuestos a un grupo de cinco legisladores de distintas expresiones del PJ, cuyos nombres figuraron, inconfundibles, marcados en verde en el tablero electrónico del recinto de la Cámara baja.
La peor parte ya se la llevó el correntino Carlos Mauricio “Camau” Espínola: el peronismo local se planteaba expulsarlo del partido ya desde la tarde del miércoles, cuando se olía su eventual conversión política. Otro que quedó en el ojo de la tormenta fue el entrerriano Edgardo Kueider, que a la hora de la verdad también apretó el botón que le garantizó el triunfo al Gobierno. Ambos fueron objeto del pase de facturas interno que le propinaron varios dirigentes de Unión por la Patria, incluida nada menos que Cristina Kirchner.
Qué dijo CFK
La expresidenta se expresó a través de Twitter, donde compartió un posteo que mostraba las boletas electorales para el Senado que encabezaron Camau (en 2021) y Kueider (en 2019), con la cara de ambos y el sello del Frente de Todos; pero también con la de dos dirigentas que habían ido segundas en las respectivas listas: Stefania Cora (actual diputada provincial por Entre Ríos) y Ana Almirón (congresal del PJ correntino). El mensaje remataba con una definición de alto voltaje: “Si hubiera sido al revés, las senadoras serían las compañeras Cora y Almirón, y no estaríamos rogando para que no voten por la entrega de la patria”.
“Era, es y será con mujeres militantes”, se subió más tarde al ring para seguir con la faena la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, quien compartió el mismo posteo que CFK. Lo propio hizo Lucia Cámpora, dirigenta de la JP. “No es para la historia, es para el futuro saber quiénes vendieron la patria hoy. Porque vamos a pelear contra los efectos de esta ley muchas veces más en adelante. Y sabremos quiénes entregaron y quiénes se opusieron y fueron leales a la patria”, criticó.
A la par de la munición gruesa, el kirchnerismo también salió a responsabilizar a Alberto Fernández por aquel orden final de las listas en ambas provincias, que llevaron a Camau y a Kueider a ocupar una banca en lugar de Cora y Almirón. El expresidente se defendió desde su cuenta oficial de prensa, en la que se señaló que “el ex presidente no tuvo injerencia en las candidaturas de los senadores de Entre Ríos y Corrientes que ayer votaron a favor de la sanción de la ley enviada por el gobierno libertario”.
La "defensa" de Kueider
A la hora de la defensa propia, Kueider no se quedó atrás. "Soy peronista, pero antes que eso, soy entrerriano y quiero lo mejor para la provincia que represento. Por eso apoyé la Ley del gobierno nacional - en general - con modificaciones y exclusiones en todos sus capítulos, que logramos a través del diálogo", fue su descargo.
El senador entrerriano recordó pese a votar afirmativamente la Ley Bases en general, también lo hizo en contra del RIGI, de ganancias y bienes personales. De esa forma, dijo, evitó "el cierre de los organismos de ciencia, tecnología y la cultura, la privatización de Aerolíneas Argentinas y los medios públicos", además de conseguir la eliminación del capítulo previsional, que ponía fin a la moratoria. "Modificamos muchos otros artículos que consideré nocivos", se justificó.
"Tenemos que salir del esquema de blanco o negro, amigo o enemigo. Si es por mí, cuanto antes se vaya Milei, mejor", le dijo más tarde al sitio LetraP. "Pero no tiene que ser porque nosotros le obstaculizamos el gobierno", reflexionó.
El correntino Camau, por su parte, 24 horas después de la sesión continuaba en silencio, la misma postura que tomó durante el debate en el recinto, del que eligió no participar. Espínola estuvo al frente de las negociaciones de un sector del PJ con el ministro de Interior, Guillermo Francos, y con la vicepresidenta Victoria Villarruel, con quienes mantuvo varias reuniones durante las últimas semanas que derivaron primero en su firma en disidencia del dictamen del oficialismo y luego su voto positivo en general.
El PJ local avanza a paso firme para expulsarlo del partido. "Se sube a un avión y se va a Buenos Aires, pareciera que allá hay otra vida, y vuelve y se encierra en su country privado", le espetó, con munición gruesa, la propia Ana Almirón, en diálogo con la AM750. Luego dijo que siente "vergüenza" de haberlo acompañado en la boleta y que iba a pedir su desafiliación.
Quiénes votaron el RIGI
Quien salió a jugar fuerte fue el ex Secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla. A través de un hilo de Twitter, apuntó contra el senador catamarqueño Guillermo Eduardo Andrada, la tucumana Sandra Mendoza y la salteña Carolina Moisés, quienes si bien votaron en contra del proyecto en general, lo hicieron a favor del RIGI, que llegó al recinto con algunas pocas modificaciones de último momento que introdujo el oficialismo.
"Ya que en mi patria hay muchas personas que pusieron el patrimonio más grande que tiene un ser humano, la propia vida, a disposición de una sociedad mejor, es importante que se sepa quienes son los senadores/as que llegaron en nombre del peronismo y se vendieron por 4 pesos con 50. Que nos expliquen a cambio de qué entregaron el futuro de la patria", denunció Peitragalla vía Twitter.
Respecto de Moisés, Pietragalla dijo que "se jactó de no acompañar la ley Bases, pero votó a favor del RIGI, que nos condiciona por 30 años a una patria cuasi colonial".
Moisés le contestó. "Yo represento a los jujeños que quieren trabajo estable, a los que quieren dejar de ser planeros, a los que están esperando que los escuchemos para darles las herramientas que ellos necesitan para tener una vida digna", le dijo.