Mientras organismos nacionales e internacionales siguen condenando al gobierno argentino por las detenciones arbitrarias durante la movilización popular frente al Congreso, Patricia Bullrich viajó hasta El Salvador para visitar una de las cárceles donde el sistema de encierro fue largamente cuestionado por transgredir los derechos humanos.

El viaje de la ministra de Seguridad a las tierras de Nayib Bukele tiene como objetivo replicar en la Argentina los regímenes de encierro cuya prueba de ensayo en Rosario tuvo como consecuencia más atentados en cadena ordenados por el narcotráfico.

Bullrich visitó el domingo el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), como antesala de lo que será un nuevo encuentro con Bukele. La reunión entre ambos es “fruto de la reunión bilateral” entre el presidente salvadoreño con Javier Milei, hace pocos meses.

“Le damos la bienvenida a la ministra Patricia Bullrich, al país más seguro de América Latina", donde “usted y su equipo van a poder conocer de primera mano el 'Modelo Bukele'”, publicó en X el ministro de Seguridad salvadoreño, Gustavo Villatoro.

La respuesta de la ministra argentina fue en igual tono: “El Salvador era el país más violento y se convirtió en un país donde las familias pueden caminar, viven en paz y tranquilidad”.

“Todo gracias a un programa de destrucción de las maras asesinas que hoy están acá encerradas”, elogió en un video filmado delante de una de las celdas masivas y junto al director de Academia Nacional de Seguridad Pública, César Flores Murillo.

El Cecot que recorrió Bullrich fue construido en una zona remota del distrito de Tecoluca, a unos 75 kilómetros al sudeste de San Salvador. Tiene capacidad para 40 mil presos y actualmente alberga a unos 14 mil, según datos oficiales.

La ministra contó que Flores Murillo le “compartió una explicación muy completa y detallada sobre la administración de la Policía y sus importantes resultados".

"También estuve con Selvin Misael Perdomo González y Josselin Esmeralda Leonardo García, egresados de la Gendarmería Nacional Argentina, que comparten y aplican su conocimiento en la Policía de aquí. ¡Un orgullo exportar la energía, la disciplina y la lealtad de nuestra fuerza!", añadió.

Luego de esa recorrida, la funcionaria tiene previsto reunirse con Bukele con miras a replicar medidas de seguridad similares a las adoptadas en El Salvador, pero contra el narcotráfico argentino.

El Salvador se encuentra desde marzo de 2022 bajo un régimen de excepción, ampliado en 26 ocasiones en el Congreso de mayoría oficialista, tras una escalada de homicidios atribuida a las pandillas.

Las organizaciones humanitarias recibieron más de 6 mil denuncias de atropellos a derechos humanos en este contexto, principalmente por detenciones arbitrarias, torturas y desapariciones de corta duración, además de denunciar la muerte de más de 300 detenidos, la mayoría con señales de violencia.

De acuerdo con los datos oficiales, en este contexto suman más de 80 mil las detenciones, de las que más de 7 mil personas habrían salido en libertad condicional.

El gobierno atribuye a este régimen gran parte de la disminución de la violencia, que venía desde 2016 tras registrar, en 2015, una tasa de 103 homicidios por cada 100 mil habitantes.