Nadie esperaba un boom de ventas para el Día del Padre, así que el comercio minorista en Rosario venía preparado y con la vara baja en el contexto del descenso general de ventas que exhibe este primer semestre del año. El volumen de actividad relacionado con la celebración de esta fecha comercial se achicó 10,2% en promedio respecto de la misma ocasión de 2023, según un relevamiento de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), a nivel nacional, y ratificado ayer desde la Asociación Empresaria de Rosario. 

Los consumidores este año parecen haber reorientado sus compras de regalos y gastronomía, y en la mayoría de los negocios hubo alguna estrategia presente para atraer ventas. Abundaron las ofertas de descuentos para compras en efectivo, promociones bancarias diversas y mucha cuotificación, incluso en variantes de 9 y 12 pagos del programa Cuota Simple, con tal de estimular la demanda. O eventos colectivos como la Gran Barata que el corredor comercial Calle San Luis organizó este sábado. 

En Rosario, como dato singular, la AER sorteó el viernes 150 vouchers de 40 mil pesos cada uno, como otro recurso para fidelizar clientes y estimular compras en 1.500 comercios que participaron de la estrategia.

"Se vendió más o menos lo que se esperaba. El resultado termina siendo negativo en comparación interanual, pero así estaban las expectativas previas: vender un poco menos que el año pasado, y eso tiene que ver con el contexto general. Vender más que el año pasado no era lo que se esperaba", explicó a Rosario/12 Nerina Díaz Carballo, de la AER.

En el ámbito comercial aseguran que esta performance no los tomó por sorpresa, y es que las mediciones de los últimos meses también indicaban una retracción en curso. En marzo se conoció que, a partir de datos de la Municipalidad, la facturación del comercio rosarino había retrocedido 20% interanual. Para abril, otro informe de Came indicaba que la disminución de ventas era de 7,3% interanual y acumulaba para entonces una caída de más de 18 puntos porcentuales para el cuatrimestre.

Una observación generalizada fue la coincidencia de la fecha con un fin de semana largo, lo cual habría contribuido a dispersar la pulsión compradora hacia el turismo. Un dato de orden nacional pero que guarda relación con el panorama rosarino es que el 63 por ciento de los comercios en los 24 centros comerciales de la ciudad realizaron alguna forma de promoción. 

La conducta de la clientela fue dispar. En comparación con el 2023, el único rubro que ahora celebró una señal de recuperación fue la indumentaria, cuyas ventas aumentaron 11% interanual. "Hay que tener en cuenta que venían de un nivel muy bajo el año pasado", advirtió Díaz Carballo.

En el resto de los rubros más previsibles para aportar los regalos para los padres, se vendió menos. El calzado vendió 4% menos que el año pasado. También en electrodomésticos estuvieron para atrás, -6%; Librerías, -11,9%; y peor aún los locales de perfumerías, -37,4%.

El promedio de lo que se gastó en cada compra para homenajear al padre anduvo en los $31.574.

"Hay una cuestión –señaló la portavoz de la AER– los comercios hicieron un esfuerzo para poder traccionar con la venta, a costa aun de perder rentabilidad. Es que el comentario coincidente en general es que los costos vienen en aumento, en logística, en tarifas y servicios, sumado a la falta de ventas que se viene observando. Entonces la decisión en general es tratar de sostener precios de venta para mantener el comercio abierto. Ese es el contexto", expuso Díaz Carballo. 

La percepción es que la actitud es desensillar hasta que aclare. Y se conforman con sacar cuentas y concluir en que estas ventas del Día del Padre ayudarán a mejorar la tendencia del mes, en relación a otros meses previos sin festejos para el consumo. "El 77% de los comerciantes comparte esa idea. Y aunque el resultado fue negativo, en esta situación, así y todo 7 de cada diez alcanzó las ventas que esperaba", contextualizó la fuente de la entidad mercantil.