En mayo, 134 personas que trabajaban en la planta de Catamarca de la fábrica TEXTILCOM fueron despedidas. Desde varios meses atrás, la fábrica venía sin pagarle a las y los trabajadores: “siempre nos decían que dábamos pérdidas”, le dijo a Catamarca/12 Cecilia, una de las ex operarias.

Hace diez días tuvo lugar una audiencia de conciliación de la que participaron representantes de la empresa, el gremio de trabajadores y el Ministerio de Trabajo y Planificación de Catamarca. “No fueron buenas noticias, la propuesta que trajo es que los primeros días del mes de julio nos pueden cancelar lo que nos deben del mes de abril”, lamentó Cecilia a este medio.

“Por el pago del mes de mayo, más la indemnización recién habría una respuesta después de julio, pero no nos garantizarían más del 50 por ciento que nos asegura en el telegrama de despido; o sea nada concreto, si aceptamos la propuesta de ellos para que nos paguen en julio tampoco nos garantizan nada, puede que no nos paguen y lo mismo debemos ir a juicio”, explicaron.

“Todos estamos decepcionados y embroncados, nos parece una falta de respeto lo que están haciendo, nos deben 2 meses y tenemos que seguir esperando”, señaló.

Los operarios tenían esperanzas de que el Gobierno pudiera intermediar de manera favorable, pero no hubo mayores avances: “Los del Ministerio de Trabajo le dijeron al abogado de la empresa que de parte de ellos ya no va a haber ninguna audiencia que ellos van a seguir por los medios legales para que el dueño pague los aportes que nos deben y a la obra social, ellos nos liberaron a que nosotros decidamos si aceptamos la propuesta que el abogado trajo, o si nosotros queremos judicializar ya es decisión nuestra. La gran mayoría no quieren aceptar, es mucho tiempo sin respuestas y ya la situación es insostenible para las familias, las cuentas no nos esperan”, explica.

Una de las salidas que circuló en un momento fue que el Ministerio de Industria facilitaría la compra de la planta con inversores privados, a modo de intermediario, pero hasta ahora no hay ofertas firmes de inversión.

TEXTILCOM llegó a Catamarca en agosto de 2022, con un beneficioso régimen de promoción para la industria textil y del calzado que el Gobierno Catamarca promocionaba como auspicioso, sin embargo, a menos de dos años de su funcionamiento ha caído en derrota.