Los principales partidos de la oposición al gobierno de la ultraderechista italiana Giorgia Meloni ensayaron este martes su unidad manifestándose en Roma contra sus reformas que, según denunciaron, "aumentarán las desigualdades" y atentarán contra la Constitución y la "unidad nacional".

La iniciativa congregó en la céntrica plaza e los Santos Apóstoles a varios centenares de personas, así como a los líderes del Partido Demócrata (PD, socialdemócrata), el Movimiento 5 Estrellas (M5S), Alianza Verdes e Izquierda (AVS), Más Europa y los sindicatos.

Se trataba de una importante demostración para los rivales del gobierno de Meloni, que buscan unir fuerzas contra la hegemonía de su coalición derechista, la de sus Hermanos de Italia, la Liga de Matteo Salvini y Forza Italia, reforzada en las elecciones europeas.

La secretaria del PD, Elly Schlein, hizo un llamamiento en este sentido al resto de partidos: "Basta divisiones (...) Es un momento crucial en la historia italiana y europea. Preparémonos, unidos y compactos", proclamó, mientras los manifestantes gritaban "unidad" y entonaban el himno partisano del 'Bella Ciao'.

Minutos antes, el Parlamento había dado el primer paso, con una votación en el Senado, en la tramitación del 'premierato', una controvertida reforma constitucional con la que Meloni aspira a imponer la elección de los futuros primeros ministros en las urnas.

Hasta la fecha lo habitual en Italia ha sido que los partidos concurran a las elecciones y después el presidente de la República proponga a un primer ministro en base a los resultados, eligiendo en varias ocasiones figuras o técnicos que no habían sido votados.

Los impulsores de la reforma, que aún tiene por delante una larga tramitación parlamentaria, quieren que "los italianos elijan a quien los gobernará", en palabras de Meloni, mientras que sus detractores avisan que el texto menguará el rol del Parlamento y del jefe del Estado.

Por otro lado, la oposición también critica duramente la reforma de la "autonomía diferenciada" para dar mayores competencias a las regiones, una de las pretensiones históricas de el partido Liga para los territorios del rico norte italiano.

"No al 'premierato' y a la autonomía diferenciada. No permitiremos que pasen. Sí a la defensa de la Constitución y de la Italia antifascista", proclamó Schlein.

El líder del M5S, Giuseppe Conte, denunció que Meloni "paga el precio político y vende la unidad del país" impulsando la autonomía entre regiones para contentar a sus socios de coalición de la Liga.

"La reforma rompe Italia. Las regiones más desfavorecidas del sur empeorarán, quedarán cada vez más atrás. Los ciudadanos del norte no deben caer en la trampa porque la reforma los empobrecerá en el medio y largo plazo, cuando un empresario encontrará legislaciones distintas al cambiar de región", avisó el ex primer ministro.

Conte también denunció "la arrogancia, prepotencia y violencia" en el Parlamento tras la pelea desatada la semana pasada. "Me siento desconcertado ante una primera ministra que no ha sido capaz de condenar la violencia", dijo ante los manifestantes.

La coalición derechista de Meloni, con su unidad, logró volver al gobierno nacional en octubre de 2022 y extender su dominio territorial, controlando 14 regiones, frente a las 5 de la izquierda.