El juez de la Corte Interamericana de Derechos Humanos Raúl Zaffaroni advirtió que el Poder Judicial “vive una situación totalmente anómala en la que se ha terminado la imparcialidad”, producto de las “presiones” que reciben los jueces por parte del poder político. El ex ministro del máximo tribunal denunció, además, que el proyecto oficial para reformar la designación del Procurador General es “inconstitucional” y cuestionó al Gobierno de intentar “convertir al Ministerio Público en una oficina del Poder Ejecutivo”.
Zaffaroni analizó la situación que atraviesa la Justicia a propósito de la presentación que junto a un grupo de intelectuales y referentes de la cultura hará esta tarde en el Congreso, “en defensa de un techo democrático común”. El objetivo de esa iniciativa, explicó el magistrado en el programa Te Quiero, es abrir un espacio de debate y publicaciones “en las que volcaremos argumentos que puedan transmitirse de boca en boca, porque cada vez nos van cerrando más medios”.
Durante un tramo de la entrevista, el docente emérito de la UBA alertó sobre un hecho que ocurrió frente a su vivienda ubicada en la zona de Flores Norte: dos autos aparecieron incendiados. “No tenemos este tipo de cosas ni hechos de vandalismo”, dijo Zaffaroni y no descartó que los hechos hubieran sido una especie de mensaje. “No puedo asegurar nada”, esgrimió.
La propuesta que se presentará esta tarde en el Congreso surgió luego de los hechos de las últimas semanas en que ex dirigentes políticos fueron “sometidos al escarnio público” con detenciones publicitadas en vivo y en directo por medios afines al gobierno de Cambiemos. En su opinión, con este tipo de hechos, algunos magistrados están restableciendo la “picota”, la piedra en la que se exponía a un condenado para someterlo frente a la población, pero con una diferencia respecto del Medioevo: “La picota televisiva es (ahora) para quienes todavía ni se les dijo de qué se los acusa”.
El ejemplo fue para referirse a la detención del ex vicepresidente Amado Boudou, de quien trascendieron imágenes en la intimidad de su vivienda mientras era notificado de su arresto. Zaffaroni sostuvo que “desde (el retorno de) la democracia nunca se vivió un momento de persecución” como el actual. “No hay precedente en mostrar a una persona descalza, en pijamas, esposada o disfrazada” mientras es privada de su libertad, ejemplificó.
Además, puso en tela de juicio el argumento sobre el presunto “entorpecimiento de la investigación” utilizado por el juez Ariel Lijo para detener a Boudou sin una declaración indagatoria previa y sin sentencia. “¿Todo ex funcionario está en condiciones de ensuciar una investigación cuando los hechos de los que se le acusan tienen prueban documental?”, se preguntó y agregó: “¿Los funcionarios en actividad (e imputados en alguna causa) no lo pueden hacer en mayor medida?”
“La prisión preventiva tendría que ser una excepción”, sobre todo con alguien que “siempre estuvo a derecho”, remarcó el ex ministro de la Corte Suprema. “Lo hubieran citado para y así evitar todo ese show, más en un caso donde se sabe que hay política”, puntualizó.
Zaffaroni adelantó que en la presentación de hoy a las 17 en el Congreso de la Nación también está incluido un posicionamiento sobre la reforma de la ley que pretende modificar el mecanismo por el cual es elegido el Procurador General de la Nación. Esa reforma que se debatirá en el ámbito legislativo, sostuvo, “es de tipo inconstitucional” pero, lamentó, “no tenemos a nadie que vaya a declararla inconstitucional".
“No olvidemos que el Ministerio Público es el que decide a quién se investiga y a quién no", y puntualizó que para ello “la imparcialidad judicial”. No obstante, lamentó en este sentido que esa imparcialidad judicial esté en riesgo: “Eso es algo que se obtiene con pluralismo interno. Pero cuando hay persecución ideológica, como en este momento, se pierde la imparcialidad.”