Durante su almuerzo en el Consejo de las Américas en Nueva York, Mauricio Macri afirmó que Alberto Nisman “lo mataron” y agregó: “Necesitamos saber quién lo hizo." A menos de 24 horas de su declaración que avanza aún más en la línea que trazó la pericia hecha por la Gendarmería para abonar la hipótesis del asesinato, el fiscal Eduardo Taiano pidió esta mañana la indagatoria de Diego Lagomarsino. El técnico informático fue quien le entregó a Nisman el arma que disparó el proyectil que terminó con su vida y Taiano lo considera partícipe necesario de su muerte, además de advertir que puede entorpecer el trámite de la investigación. El juez Julián Ercolini implantó el secreto de sumario en la causa y debe resolver si acepta o no el pedido de Taiano.
La pericia de Gendarmería que sostiene que a Nisman lo mataron contradice las conclusiones de los especialistas del Cuerpo Médico Forense, dependiente de la Corte Suprema, y es la base sobre la cual con el auspicio del Gobierno en Comodoro Py se pasó a investigar la muerte del ex fiscal como un asesinato. La mano del macrismo detrás de ese redireccionamiento del caso se hizo más que evidente en las declaraciones de Macri en Nueva York que dan por resuelto un hecho que dista mucho de estar esclarecido.
“Lo mataron. Y necesitamos saber quién lo hizo”, fue la traducción en simultaneo de lo que Macri dijo sobre Nisman en el Consejo de las Américas. Iván Pavlovsky, vocero del Presidente, confirmó a The Associated Press que esas fueron exactamente las palabras de Macri.
A tono con el discurso del Gobierno en torno al caso Nisman, Macri afirmó después que “estamos apoyando a la justicia, poniendo a su disposición todos los recursos que necesitan” y agregó que esclarecer la muerte del fiscal es fundamental porque “tiene que ver también con aportar claridad a nuestro futuro... necesitamos la verdad en todos los aspectos en Argentina. Yo le he prometido a la gente de mi país que siempre les voy a decir la verdad”.
Lo dicho por Macri tuvo su eco en los tribunales federales de Retiro. Taiano ya pidió la indagatoria de Lagomarsino. También solicitó que sean indagados cuatro custodios de Nisman, con el argumento de que no habrían cumplido con los deberes de funcionario público al no proteger la vida del fiscal.
Taiano considera al técnico informático partícipe de la muerte de Nisman por haberle dado el arma que terminó con su vida. Según su dictamen, la pistola de Lagomarsino cumplió el rol de arma “amiga” como parte del posterior “montaje de suicidio”. El fiscal aclaró que no hay elementos de prueba para sostener que el técnico informático haya sido el autor del homicidio, pero sí para pensar que fue parte de un plan criminal.
El llamado a indagatoria de Lagomarsino constituye un aval la pericia de la Gendarmería que concluyó que Nisman fue asesinado. "Los integrantes de esta junta interdisciplinaria de Gendarmería Nacional se encuentran en condiciones de concluir que la muerte violenta de Nisman se trató de un homicidio", señalaron de esa fuerza de seguridad. La pericia de los gendarmes contradice la que antes habían hecho los peritos oficiales al mando de Roberto Godoy -entonces decano del Cuerpo Médico Forense de la Corte Suprema– y otros de la Policía Federal, que no hallaron ningún signo de homicidio en el caso.