El presidente Javier Milei, luego de encabezar un acto en Rosario por el día de la bandera, y antes de subirse a un avión para ir otra vez a Europa, decidió poner la cara él mismo y encabezar en casa Rosada una reunión con gobernadores del norte, a los que les pidió el apoyo para la sanción definitiva de la Ley Bases y el pacto Fiscal. Ambos proyectos se tratarán la semana que viene en la Cámara de Diputados y el gobierno puja para que se aprueben sin las modificaciones que introdujo el Senado, salvo aquellas vinculadas a "mejoras" en el RIGI. En el Salón Eva Perón estuvieron con Milei, con su hermana Karina y con el jefe de gabinete Guillermo Francos, los gobernadores peronistas de Catamarca, Raúl Jalil; Tucumán, Osvaldo Jaldo y de Salta, Gustavo Sáenz. También el radical de Jujuy, Carlos Sadir.

Al salir, aseguraron, sin tapujos, que apoyan la aprobación de las leyes "tal como las quiere el gobierno", y confirmaron que participarán del acto por el "Pacto de Mayo", que Milei confirmó que, finalmente, será el 9 de julio en Tucumán. También contaron que Milei les habló de su amigo, el magnate que se quiere quedar con el "oro blanco" del norte, Elon Musk. De allí Milei se fue a la Quinta de Olivos y finalmente no se reunió con Federico Sturzenegger, como se especulaba. El desembarco del exmacrista al gabinete quedará para el regreso.

El encuentro

Cerca de las doce del mediodía los tres gobernadores peronistas y el radical ingresaron sonrientes a la Casa Rosada por el salón de los bustos con regalos para el Presidente. Entre ellos llevaron una estatuilla y un poncho de Martín Miguel de Güemes, con el que, más tarde, Milei posó para la foto que todos compartieron en sus redes. De allí, se dirigieron al salón Eva Perón y se quedaron esperando al mandatario. Después de ellos, una vez que arribó de Rosario, Milei se sumó acompañado de su hermana Karina y de Francos. 

La reunión no duró más de 40 minutos. La casa Rosada estaba desolada porque es poco común que un día feriado haya actividad oficial. Sin embargo, como el Presidente está tanto tiempo fuera del país, quería aprovechar el día antes de irse para concretar esa reunión con los gobernadores. Se quería asegurar el acompañamiento de ellos y sus diputados la semana próxima en el recinto, mientras él esté en Europa. Karina estuvo un rato en la reunión y luego se retiró. 

"Fue una reunión distendida y muy buena. Le dijimos que vamos a Tucumán el 9 de julio y que vamos a ayudar en el marco de esta situación delicada", dijo uno de los gobernadores en diálogo con este diario y, por más que el bloque de su partido en el Congreso votó en forma mayoritaria en contra de las leyes, dijo: "Nosotros venimos acompañando el RIGI y también la vuelta del impuesto a las ganancias". Por último disparó: "Esperamos que la ley salga". 

Ante la consulta de este medio a uno de los gobernadores acerca de si no creía que acompañar la ley Bases era ir en contra de los principios del peronismo, por ejemplo, porque el proyecto contiene una reforma laboral que va contra varios derechos adquiridos, el gobernador defendió su postura: "Nosotros prometimos nuestro acompañamiento por el momento delicado que vive el país. Por otro lado, los jóvenes quieren una reforma. Brasil, por ejemplo, ya se adecuó a los nuevos tiempos y ahora nos toca a nosotros".

Otro de los ejes centrales del corto encuentro fue, por supuesto, la minería. Sucede que tres de las cuatro provincias que estuvieron sentadas en la mesa tienen litio. "Hablamos de la minería y de las posibilidades de inversión que hay de la Argentina y de otros países", expresó uno de los mandatarios provinciales. Milei, en tanto, les habló de su amigo magnate. "Estamos con muchas inversiones, hay más de 10 países interesados en nuestros recursos", se jactó uno de los mandatarios provinciales. 

Jaldo declaró que “vinimos a ratificar el compromiso de Tucumán para la aprobación de la Ley Bases en la nueva instancia en Diputados” y añadió: “Esta es la ley que tanta falta le hace al país y a las provincias, porque el paquete fiscal favorece a todas las provincias”. Sáenz se encargó de entregarle a Milei el pacto de Güemes que firmaron días atrás en su provincia, pero del que se desentendieron el resto de los gobernadores. "Eso es una cosa de Salta", decían. Sáenz contó: "Le entregué personalmente el Pacto de Güemes, nuestra propuesta del nuevo régimen de coparticipación federal de impuestos, el proyecto del corredor Bioceánico y la necesidad de continuidad de las obras necesarias para el crecimiento de nuestra región".

Los gobernadores también confirmaron que irán el 9 de julio a Tucumán a recibir la "orden de Mayo". Desde Casa Rosada siguen insistiendo con que le darán esa "condecoración" a los gobernadores obedientes, como premio por su acompañamiento con la Ley Bases. Ese día Milei deberá participar del Te Deum y desde Casa Rosada también estaban organizando un desfile con la presencia de ocho mil representantes de todas las fuerzas de Seguridad. Por eso evaluaban que la fecha para el pacto de Mayo sea otra, sin embargo, el mandatario anunció finalmente que sería ese día y, ya no en Córdoba, sino en Tucumán. 

"Quiero aprovechar este día, avanzada la Ley Bases y el Paquete Fiscal, para convocar a todas las autoridades políticas y a toda la ciudadanía a que nos encontremos el 9 de julio en Tucumán para firmar el Pacto de Mayo y empecemos a dar vuelta la página de nuestra historia", había dicho el Presidente. 

Una vez que esté la firma, el mandatario avanzará con la conformación de un "Consejo de Mayo para completar esta sagrada tarea". Es decir, para que baje a leyes el decálogo del pacto. Ese Consejo, señaló Milei en el acto que hizo en Córdoba el 25 de mayo: "estará integrado por un representante del gobierno nacional, uno de las provincias, uno de la cámara de diputados, otro de la de senadores, un representante de las organizaciones sindicales y uno del empresariado argentino". Es decir, por casi todos los sectores que el gobierno denosta como "la casta".

Según contaron en diálogo con Página12 los gobernadores que este jueves se reunieron con Milei, ellos no propusieron durante la reunión sumar ningún punto al pacto de Mayo original. Allí figuran: "La inviolabilidad de la propiedad privada; El equilibrio fiscal innegociable; La reducción del gasto público; Una reforma tributaria; La rediscusión de la coparticipación federal; Un compromiso de las provincias de avanzar en la explotación de los recursos naturales; Una reforma laboral moderna; Una reforma previsional que respete a quienes aportaron y permita, a quienes prefieran, suscribirse a un sistema privado; Una reforma política estructural y la apertura al comercio internacional".

El gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro --que no estuvo en Casa Rosada, pero sí en Rosario--, había dicho que quería agregar al pacto algunos puntos vinculados "al fortalecimiento y el robustecimiento del sistema productivo", y también otros relacionados "al financiamiento del sistema educativo". En Balcarce 50 dicen que es posible que se agregue algo de educación, pero que hay que esperar a que se conforme el Consejo. En esa mesa, a la que irán representantes de los sectores elegidos por los propios espacios, se terminarán de definir esos temas.