Coca y Mangacha son profesoras de la vieja escuela, asignadas ahora a "tareas diferentes" y nostálgicas de una época donde el saber tenía poseedoras. En No descansa nunca, desde su puesto, estas docentes espían la vida escolar, mientras desgranan retazos de su vida, en una comedia tan desopilante como precisa en su crítica a una institución anacrónica. La producción de Hijos de Roche tiene dramaturgia de Romina Mazzadi Arro, con las memorables actuaciones de Elizabeth Cunsolo y Paula García Jurado (A las 21, en Espacio Bravo.)