El gremio de maquinistas de trenes, La Fraternidad, acató la conciliación obligatoria y dejó sin efecto la medida de fuerza de 24 horas prevista para este martes 25 de junio. La protesta consistía en reducir la velocidad de los trenes a 30 kilómetros por hora, una acción con menor impacto que un paro pero que hubiese afectado considerablemente en el sistema de transporte público y en la movilidad urbana.

El sindicato La Fraternidad había anunciado la medida con alcance nacional tras la postergación de una medida de fuerza originalmente programada para el 4 de junio, que fue suspendida a solicitud del Gobierno Nacional.

"Participamos en cuatro reuniones consecutivas mostrando la mejor de las predisposiciones para llegar a un acuerdo, pero no hubo respuestas", explicaron desde el sindicato respecto a la negociación paritaria que busca menguar la pérdida de poder adquisitivo de los salarios.

En este contexto, el gremio liderado por Omar Maturano indicó que "la intención no es perjudicar a los usuarios", sino visibilizar la falta de propuestas por parte del Gobierno a sus "legítimos reclamos".

Las líneas ferroviarias que se iba a ver afectadas por la medida de fuerza incluyen el Sarmiento, Roca, Mitre, San Martín, Belgrano Sur, Belgrano Norte y el Tren de la Costa, así como todos los trenes de pasajeros y de carga del país.

La medida de fuerza finalmente no se concretó ante la intervención de Trabajo. En busca de abrir una instancia de diálogo que evitara a su vez los inconvenientes que la medida de fuerza le generaría a los usuarios, las autoridades nacionales dictaron la conciliación obligatoria y el gremio la acató. "El Secretariado Nacional acata dicha resolución como es su centenaria costumbre, dentro de la ley todo", anunció el gremio en un comunicado en el que también dicjo esperar que "el diálogo en este nuevo escenario pueda hacer que las partes arriben a la recomposición salarial reclamada".


Cómo venían las negociaciones con el Gobierno

Unas horas antes del inicio del finalmente suspendido del 4 de junio, Omar Maturano, secretario general de La Fraternidad, se reunió con el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y el secretario de Transporte, Franco Mogetta, en Casa Rosada.

Tras el encuentro, el líder sindical de los empleados de trenes señaló que el Gobierno les ofreció un aumento del 2% en abril y otro 7% en mayo, a pagar a fines de junio, pero esta propuesta no fue aceptada por los maquinistas.

En este contexto, y ante las diferencias salariales, las partes acordaron reunirse nuevamente el jueves 6 de junio a las 11 de la mañana, con el objetivo de buscar una conciliación. En aquel momento, el gremio definió suspender el paro de trenes tras la apertura al diálogo por parte del Gobierno. La conciliación obligatoria abre ahora una nueva instancia de negociación.

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