Emiliano Martínez (7): no tocó la pelota en todo el primer tiempo porque los dirigidos por el "Tigre" Gareca no patearon al arco; en el complemento, el "Dibu" demostró por qué es insustituible en la Argentina con dos atajadones ante el peligroso Echeverría.
Nahuel Molina (6): se impuso en su particular duelo ante una figura como Alexis Sánchez y en una de sus escaladas por derecha casi provoca un gol en contra de Pulgar con un centro venenoso al corazón del área chilena; en el arranque de la segunda parte, la Pulga se la dejó servida y el defensor del Atlético Madrid le quemó las manos a Bravo, aunque descuidó a Echeverría en una clarita que tuvo el buen volante de Huracán; por él ingresó el "Huevo" Acuña.
Cristian Romero (8): sólido en el mano a mano y ganando siempre de arriba, también se mandó con decisión al ataque por el centro y hasta se animó con un par de pases entre líneas como para demostrar que el traje de armador ocasional no le sienta mal.
Lisandro Martínez (7): firme en la marca, seguro en las salidas desde el fondo y rápido para cubrir las espaldas de un compañero, un remate suyo en plena posición de ataque dio en la mano de Isla dentro del área que el árbitro -evidentemente- juzgó sin intención o directamente ni registró.
Nicolás Tagliafico (5): Dávila y en especial Vargas elegían su sector para progresar en ofensiva, por lo que en ocasiones debía ser auxiliado tanto por Licha Martínez como por Nico González, lo que redujo sus incursiones en ofensiva.
Rodrigo De Paul (8): arrancó algo embroncado por la mano de un mediocampista chileno que pasó inadvertida por el árbitro, el cerebro del equipo ejercía la presión acostumbrada en mitad de cancha, desde donde pivoteaba y hasta llegaba al área rival con sorpresa para ensayar un par de remates que salieron por encima del travesaño; en el complemento se puso el equipo al hombro y fue uno de los mejores.
Enzo Fernández (5): si bien más adelantado en el doble 5 que conformaba con Mac Allister, al volante de Chelsea le faltó un poco de precisión para asociarse mejor y contó con un remate bajo sobre la media hora de juego; aún en busca de ritmo luego de que a fines de abril fuera operado por una lesión inguinal que lo mantuvo alejado de las canchas, en el complemento fue reemplazado por Lo Celso.
Alexis Mac Allister (6): muy metido en su rol de recuperador, prácticamente resignó la intención de prosperar en ataque, aunque en la primera que apareció por sorpresa no pudo aprovechar un pase gol de su capitán, al que no llegó por poco y cara a cara con Bravo.
Nicolás González (7): muy participativo, velocísimo en las transiciones y diagonales, bajaba por su franja para ayudar a Tagliafico y presionaba en la salida adversaria; en los segundos 45 minutos recibió un pase fenomenal de Messi, sacó a pasear a Isla y terminó haciendo temblar el travesaño con un furibundo zurdazo. Cumplió.
Lionel Messi (8): con 37 años recién cumplidos, su amor por la pelota permanece incólume, no le pesó el rigor con que lo trató la última línea trasandina hasta que una artera paralítica de Paulo Díaz pareció afectarle el aductor derecho, aunque enseguida se encendió y desde 30 metros sacó un disparo que rozó un poste con el arquero vencido; en el complemento metió estiletazos con su sello y hasta pudo hacer un gol olímpico de no ser por el atento Bravo, que conoce al 10 de la época en que ambos compartieron plantel en Barcelona.
Julián Alvarez (6): abnegado y sacrificado como siempre a la hora de dar una mano en los repliegues, como en un abanico jugó abierto por todo el frente de ataque y tuvo una de frente al arco tras ser habilitado desde la izquierda por Nico González, pero el balón fue controlado por el veterano Bravo, y otra más de zurda que salió alta antes del entretiempo.
Giovani Lo Celso (-): con un poco más de movilidad que Enzo Fernández, de entrada dejó de cara al gol a Messi, que estaba adelantado.
Angel Di María (-): tras su primera gambeta endiablada, Núñez lo taló apenas fuera del área, pero el árbitro se hizo el oso; en tiempo adicional fue muy generoso y se la dejó servida al "Toro" Martínez, que no pudo marcar doblete.
Lautaro Martínez (-): se apuró para definir en la primera que tuvo, no falló en la segunda tras un tiro de esquina de Messi y definitivamente volvió a amigarse con el gol; pudo hacer otro más en el final.
Gonzalo Montiel (-): reemplazó a un agotado Tagliafico cerca del epílogo.
Marcos Acuña (-): jugó un puñado de minutos y no gravitó.