La selección de Venezuela le ganó 1 a 0 a México en la segunda fecha del Grupo B de la Copa América de Estados Unidos 2024 y sigue reafirmando la constante evolución de un equipo que hace algunos años era el peor conjunto nacional de Sudamérica.

Sin lugar a dudas, la "Vinotinto" vive los mejores momentos de su historia futbolística y lo está demostrando este año en el certamen continental habiendo clasificado a cuartos de final por quinta vez en las últimas siete ediciones y con la gran probabilidad de ser líder de su grupo con los 9 puntos posibles siendo una selección que ganó un solo encuentro entre las 44 Copas América que jugó entre 1967 y 2004. Como si fuera poco, es el único equipo nacional sudamericano que no disputó una Copa del Mundo en toda su historia.

El buen pasar venezolano no se dio por arte de magia sino por la madurez que consiguió el seleccionado tras décadas de trabajo incesante en el fútbol, un deporte que en Venezuela está en tercer orden por detrás del béisbol y del básquetbol, pero que, en los últimos años, fue tomando fuerza haciendo que la selección pase de ser el hazmerreír de Latinoamérica y se convierta en competitiva para cualquiera de las otras del continente.

El fuego de hacer crecer al fútbol venezolano lo inició el equipo comandado por Richard Páez cuando, en el segundo semestre de 2001, ganó cuatro partidos al hilo a Uruguay, Chile, Perú y Paraguay en las Eliminatorias para el Mundial de Corea y Japón 2002. Un hecho realmente llamativo para una selección que solo había ganado en tres ocasiones durante 34 años y que masificó el fútbol en la población que le empezaba a exigir otra actitud y rendimiento en sus presentaciones.

Seis años después, Venezuela organizó la Copa América con la presencia de futbolistas de élite como Juan Román Riquelme, el brasileño Robinho, el uruguayo Forlán o un joven Lionel Messi que estaba disputando su segunda competición oficial con la camiseta argentina. La "Vinotinto" realizó un gran papel dentro de sus posibilidades llegando a cuartos de final donde cayó 4-1 ante Uruguay pero, en el Grupo A, fue líder con 5 puntos a causa de dos empates y el triunfo ante Perú por 2-0 que significó el segundo en la historia de la competición tras lo que fue la victoria 3-0 a Bolivia en 1967.

El hecho de que Venezuela sea anfitriona del torneo de selecciones más antiguo del mundo motivó a una ampliación de la cantidad de participantes en la Primera División, pasando de 10 a 18 equipos, para sacar provecho de la infraestructura que había dejado el torneo continental. Eso le dio un marco formativo a la técnica, la irreverencia y el talento en bruto gestado en las calles venezolanas.

En 2009, bajo las órdenes de César Farías, la selección de Venezuela participó por primera vez en un torneo internacional organizado por la FIFA. Con jóvenes figuras como Salomón Rondón, la Vinotinto disputó la Copa del Mundo Sub-20 siendo segundo en el Grupo B detrás de España y quedando eliminado en octavos de final con Emiratos Árabes Unidos.

Dos años después, el propio Farías comandó a la selección venezolana en la Copa América 2011, disputada en Argentina, con algunos de los estandartes de aquel plantel que disputó el Mundial juvenil en 2009. El resultado fue toda una sorpresa para el continente: cuarto puesto en el certamen continental saliendo segundo en el Grupo B atrás de Brasil, dejando afuera a Chile en cuartos y cayendo con Paraguay en semifinales y con Perú en el partido por el tercer lugar.

Pero, sin dudas, el gran revolucionario en la estructura de las selecciones de Venezuela fue Rafael Dudamel, jugador de aquel equipo que ganó cuatro partidos seguidos en 2001, que asumió en 2012 como entrenador de la Sub-17. El ex arquero usó el orden defensivo impuesto por Farías como cimiento para construir un estilo de juego moderno y dinámico con matices tácticos y conceptos claros.

Con los menores de 17 años consiguió la clasificación al Mundial de la categoría celebrado en Emiratos Árabes Unidos en 2013. Luego de la competición intercontinental, tuvo un pequeño paso por Deportivo Lara hasta agosto de 2015 cuando retornó a las juveniles como seleccionador de la Sub-20. En esta categoría, el ex arquero de Quilmes demostró su capacidad de conducción y aumentó las cargas de entrenamiento y de participaciones en torneos internacionales, jugando 37 amistosos. Esto asombró gratamente a los directivos de la Federación Venezolana de Fútbol (FVF) quienes no dudaron en encargarle la selección absoluta.

En el Sub-20, el entrenador tuvo la suerte de cruzarse con varios integrantes de lo que hoy es la "generación dorada" de Venezuela como Wuilker Faríñez, Ronald Hernández, Yangel Herrera y Yeferson Soteldo. En 2017, con Dudamel a la cabeza, perdieron solamente dos partidos en el Sudamericano Sub 20 y, en la Copa del Mundo disputada en Corea del Sur, se consagraron subcampeones completando una fase de grupos inmejorable con puntaje perfecto, 10 goles a favor y la valla invicta.

Tras el histórico segundo puesto en el Mundial jugado en Asia, Dudamel reunió a las joyas de aquel Sub-20 y los congenió con futbolistas experimentados como Rondón, Tomás Rincón, Josef Martínez, Darwin Machis y otros tantos que competían en las mejores ligas del mundo. Esta mixtura fue la que, efectivamente, consolidó la madurez de Venezuela como selección en 2019 alcanzando los cuartos de final de la Copa América disputada en Brasil donde quedó afuera con Argentina.

En el transcurso de esta evolución del fútbol venezolano, a la "Vinotinto" se le siguió haciendo esquiva la clasificación a su primer Copa del Mundo. Para la edición de 2010, terminó antepenúltimo pero, para Brasil 2014, Venezuela le ganó por primera vez a Argentina de manera oficial y terminó sexto a tan solo cinco puntos del repechaje al que terminó clasificando Uruguay.

Tanto para Rusia 2018 como para Qatar 2022, el equipo venezolano culminó en el último lugar de la tabla y sufrió la ida de Dudamel, lo que hizo que la "Vinotinto" tenga tres entrenadores (Dudamel, el portugués José Peseiro y Leo González) entre 2020 y 2021. Este proceso de Eliminatorias lo culminó el argentino José Pekerman, reconocido por sus trabajos en las juveniles de la "Albiceleste".

Quién fuese entrenador de la Selección argentina en el Mundial de Alemania 2006 renunció al cargo en Venezuela el 7 de marzo de 2023 y, tres días después, su compatriota y ayudante de campo Fernando Batista tomó el puesto bajo la órbita de su hermano Sergio como gerente general de las selecciones nacionales del fútbol venezolano.

Con la llegada de Batista y la ampliación a 6 cupos mundialistas para CONMEBOL, los venezolanos se ilusionan con llegar a su primer Mundial debido a que el equipo se recuperó del bache que atravesó los últimos años y, en las actuales Eliminatorias para la Copa del Mundo de Estados Unidos, México y Canadá 2026, la selección de Venezuela está en el cuarto puesto con 9 unidades ya que ganó dos partidos, perdió en el debut ante Colombia y empató tres encuentros de los cuales se destaca el histórico 1-1 con Brasil en Cuiabá.