La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner recomendó en sus redes sociales una nota publicada este sábado en Página|12. "Una semana que explica a la Argentina. Preciso y objetivo análisis… imperdible", afirmó.

La nota en cuestión es "Explicación", del periodista Luis Brushtein, una reflexión acerca de cómo se relaciona la sanción de la Ley Bases con el intento de asesinato de la exvice en 1 de septiembre de 2022.

La expresidenta destacó una serie de fragmentos en los que Brushtein señala que "la aprobación de la Ley Bases es la consecuencia de que finalmente los tres poderes republicanos han sido arrasados por los poderes fácticos englobados en la cúspide de de la pirámide social, un sector del capital concentrado en alianza con transnacionales".

El proyecto de la ley, que ni el propio oficialismo pudo justificar ni defender en el Congreso, que entregó con moño el economista Federico Sturzenegger, fue elaborado en los estudios de abogacía de las principales corporaciones

"Cada una puso lo que le convenía a sus clientes. Ni el poder económico ni los estudios de abogados forman parte de los poderes republicanos. Son poderes fácticos, igual que los medios de comunicación tradicionales y las redes. A poco de recuperar la democracia se estableció una tensión intensa entre los poderes republicanos y los poderes fácticos", apunta Brushtein.

Son esos mismos poderes, continúa el periodista de este diario, quienes vieron a Cristina Kirchner como un obstáculo para lograr su cometido. "Cuando Patricia Bullrich era presidenta del PRO se negó a repudiar el intento de asesinato de Cristina Kirchner -apunta en otro fragmento compartido por CFK-. En ese punto se quebró el contrato democrático establecido cuando se retiró la dictadura. Los que festejaron, los que callaron, los que minimizaron, fueron cómplices del discurso de odio que habían instalado en la sociedad y que culminó con ese atentado".

Brushtein, además, destaca cómo al momento de investigar el atentado "los investigadores borraron los celulares de los atacantes y de todas las personas involucradas" y nunca se investigaron las conexiones políticas ni el financiamiento de esas organizaciones ultraderechistas, a pesar de que "era sabido que uno de sus principales dirigentes recibía mucho dinero de empresas de la familia Caputo".

Y concluye: "En la misma semana que comenzó el juicio por el intento de asesinato de Cristina Kirchner –ninguneado por las corporaciones de medios-- se aprobó la ley Bases. El juicio, una consecuencia del discurso de odio alimentado por quienes querían proscribir y erradicar un obstáculo para sus intereses. Y la aprobación de la Ley Bases, la consagración de esos intereses. Una semana que explica a la Argentina".