Banderas multicolores inundaron este domingo el centro de la ciudad de Nueva York para celebrar la multitudinaria marcha del Orgullo bajo el lema 'Reflexionar. Empoderar. Unir', un recordatorio de que el movimiento nació como una protesta contra la intolerancia dondequiera que se manifieste.
Miles de asistentes bailaron al ritmo de la música de las carrozas en los alrededores de Stonewall, local de referencia de la comunidad gay, donde en la madrugada del 28 de junio de 1969 tuvo lugar una violenta redada policial, que encendió la mecha de la lucha por los derechos del colectivo. El 28 de junio de 1970 se dieron las primeras marchas del Orgullo en Nueva York y Los Ángeles, en conmemoración al primer aniversario de los disturbios.
"Es un día de alegría y felicidad. Estamos rodeados de arcoíris y música", dijo a EFE con una sonrisa y purpurina en la cara Cathy, una joven de 21 años que asistió a la marcha acompañada de su novia.
Pese a que con el paso de los años se ha ido diluyendo el sentimiento activista del evento y ha ido tomando más fuerza la celebración y la fiestas, en la marcha sigue habiendo carrozas con reivindicaciones, como fue el caso este año de una dedicada a la "liberación de Palestina".
También se notó en la jornada de hoy que las elecciones presidenciales son en unos meses y algunos asistentes optaron por decorar sus atuendos para mandar apoyo a su candidato favorito.
"Si no votas por Donald Trump puedes besar mi trasero blanco y gay", se leía en la camiseta de John McQuaig, cuyo novio, Pete, ondeaba una bandera contra la candidatura del demócrata Joe Biden.
La pareja indicó a EFE que, pese a estar en minoría en el evento, han recibido "mucho amor" en esta marcha.
"Incluso algunas de las personas que tienen puntos de vista opuestos, están dispuestas a hablar con nosotros, en lugar de simplemente escupir y gritar (…) Una parte importante de los disturbios de Stonewall fue que el pueblo oprimido defendió sus derechos. Por eso estamos aquí, nos sentimos parte de la comunidad gay que no es escuchada", explicó McQuaig.
Otra cosa que ha cambiado con respecto a otros años es la cantidad de vendedores ambulantes que despachan todo tipo de parafernalia: abanicos gigantes, banderas de arcoíris de todos los tamaños, pintura facial, comida y mucho alcohol.
Mucha seguridad
El Departamento de Policía de Nueva York dijo que la marcha del Orgullo de este fin de semana y otros eventos relacionados con el Orgullo en la Gran Manzana podrían ser blanco de violencia.
"La comunidad LGBTQIA+ sigue siendo un objetivo de alta prioridad para los extremistas violentos y los actores maliciosos de todo el espectro ideológico, lo que requiere una mayor vigilancia durante la Marcha del Orgullo y otros eventos relacionados con el Orgullo en la ciudad de Nueva York", indicó la policía, según ABC.
No obstante, un policía encargado de la seguridad del evento señaló a EFE que, por el momento, no se habían visto incidentes.
En el marco del evento, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, anunció hoy una inversión de 5,4 millones de dólares en la comunidad LGBTQ+ de Nueva York.