“Tengo 10 años, y quiero que las niñas levanten la mano”. Así se titula una columna de opinión recientemente publicada por el New York Times, escrita por una girl scout de Washington DC llamada Alice Paul Tapper. Allí, la muchachita, que va a quinto grado, cuenta que el pasado año cayó en la cuenta de que, cuando la maestra hacía una pregunta en la escuela, generalmente eran los varones los que levantaban la mano: “Las chicas no lo hacían por miedo a que su respuesta fuera incorrecta, por miedo a que las avergonzaran. Me parece que también tenían miedo a no lograr capturar la atención de la profesora, en tanto los varones ya la habían monopolizado”. La petite Alice –que es hija del reconocido periodista de CNN Jake Tapper– contó a su mamá la situación, y juntas decidieron acercar el tópico a su tropa exploradora de Girl Scouts, donde –para sorpresa de nadie– sus compañeritas reconocieron que el mismo episodio era moneda corriente en sus clases. Entonces tuvieron encantadora idea: crear una insignia que bautizaron “Raise Your Hand”, amén de alentar y premiar a las chicuelas que, levantando las manos, hicieran escuchar sus voces en sus escuelas.
“Nuestro mensaje es: tengan confianza, conviértanse en líderes”, arenga la jovencita, y explica que lo importante es hacerse escuchar, sin temer a equivocarse: “Si tu respuesta es incorrecta, tampoco es el fin del mundo. No estás participando en un programa de tevé para ganar un millón de dólares...”. Relata además Tapper que tanto entusiasmó a su team el proyecto que, como equipo, decidieron presentarlo al consejo scout local, que representa a 62 mil niñas en la región. El consejo no solo se mostró entusiasmado con la propuesta: pasó aviso a otros teams de Estados Unidos, que ya han comenzado a solicitar que les envíen las mentadas insignias. “Como cualquier parche de las Girl Scouts, tenés que ganarte este. Para hacerlo, además de levantar la mano en clase, debés comprometer a –al menos– otras tres compañeritas para que hagan lo mismo”, informa Alice, que luce su emblema con sumo orgullo. Por lo demás, comparte simpática historia: que su mamá eligió llamarla Alice Paul en honor a la homónima sufragista pionera, defensora de los derechos de la mujer. “Llevar su nombre me hace sentir especial. Para alcanzar la equidad, tenemos que seguir peleando”, cierra la pequeña activista.