“Se perdieron dos años en los que hubo inacción, no gradualismo”, aseguró ayer el economista Carlos Melconian en un seminario organizado por la Unión Comercial e Industrial de Mendoza. No es la primera vez que el ex presidente del Banco Nación toma distancia de la gestión que lleva adelante el equipo económico, pese a ser un hombre de consulta del presidente Mauricio Macri al que incluso se lo ha señalado varias veces como candidato a ministro de Economía. La diferencia es que en esta ocasión se mostró crítico, pero al mismo tiempo esperanzando con las reformas que anunció Macri luego del triunfo electoral del 22 de octubre. “La sensación actual es que empezó algo, y se terminó la inacción”, agregó.
Melconian había comenzado a diferenciarse públicamente del gobierno durante el año pasado cuando todavía era funcionario. Primero criticó por lo bajo la salida del “cepo”, luego el Banco Nación, bajo su conducción, se negó a ingresar a los planes de créditos indexados por inflación propuestos por el Central y comenzó a armar su propio esquema de préstamos hipotecarios ajustados por la evolución de los salarios y finalmente crítico la estrategia de endeudamiento comandada por Luis Caputo. “Si te pasás de rosca, termina teniendo razón Lavagna”, advirtió. Esa serie de comentarios propios de un libre pensador llevaron al jefe de Gabinete, Marcos Peña, a forzar su salida con el argumento de que había que “homogeneizar el equipo”.
Desde afuera, Melconian volvió a mostrarse crítico con el rumbo económico. En el Congreso del Instituto de Ejecutivos de Finanzas que se desarrolló en Bariloche a mediados de septiembre, este economista fanático de Racing dijo que no veía un plan antiinflacionario. “Nadie me puede explicar cómo vamos a hacer para bajar la inflación al 10 o 12 por ciento en 2018 con agregados monetarios que crecen al 35 por ciento”, sostuvo. “Hay una preocupante inacción fiscal, veo muy difícil bajar el déficit primario el año que viene. Para mí va a quedar igual que este año, en torno al 4,2/4,3 por ciento. Necesitamos un programa fiscal en serio para bajar el déficit. No lo veo”, agregó y se manifestó a favor de cortar subsidios, poniendo como ejemplo la tarifa de colectivo del Área Metropolitana de Buenos Aires. También advirtió sobre los riesgos de un tipo de cambio apreciado. “Estamos entrando en un problema de atraso cambiario que afecta a las inversiones. El dólar promedio de los últimos 70 años estaría en 23 pesos, Kirchner lo recibió en 34, Macri en 15, lo llevó a 21 y hoy está en 17,5”, resaltó.
Ayer Melconian habló en el seminario “La Argentina que viene, perspectivas y desafíos”, donde se volvió a Mostar crítico con algunas medidas, pero esperanzado con los anuncios de las últimas semanas. Melconian también consideró que “el presidente fue muy mal asesorado al hacer la reparación histórica”. “Si yo hubiera sido el ministro de Economía, esa propuesta quedaba en mi despacho y no le llegaba nunca al Presidente”, remarco. “Ahora –agregó–, para solucionar ese problema hubo que crear un paquete de reformas previsionales que viene a reparar la reparación histórica. La reparación histórica es un caso de mala praxis”, criticó. En un salón colmado de empresarios y público en general, el ex titular del BNA manifestó: “de todas las medidas propuestas la reforma previsional es la más importante; si no sale eso, lo demás no sirve y yo creo que va a salir”. Por otra parte, indicó que “la reforma fiscal avanzará si mejoran los números fiscales, si no se va a interrumpir como pasó con las retenciones este año; algo que también va a depender de la situación del mundo y de la plata que consiga (Luis) Caputo.