Un astronauta de la NASA compartió en sus redes sociales una foto que tomó del huracán Beryl desde el espacio, en la que se puede apreciar el magnífico potencial del fenómeno meteorológico tiene en alerta al mundo desde fines de junio.
Los científicos meteorólogos de la región americana siguen el avance de Beryl, el primer huracán de 2024 en aguas abiertas del Atlántico —que por estos días transita por el Mar Caribe y se desplaza hacia el oeste-noroeste con trayectoria hacia la Península de Yucatán, en México—, tras causar severos estragos en distintas ciudades y hasta siete muertos.
En este marco, el astronauta Matthew Dominick compartió en su cuenta de X una imagen que sacó el 1º de julio, según informó la agencia aeroespacial estadounidense, mientras se encontraba a bordo de la Estación Espacial Internacional.
"Mirar fijamente al ojo (del huracán) con la lente de 50 a 500 mm (de la cámara) me produjo una sensación inquietante y un alto nivel de emoción de nerd del clima", contó en su posteo.
Asimismo, la agencia aeroespacial de Estados Unidos explicó en su sitio web la importancia de estas imágenes para avances científicos y alertas tempranas a las comunidades. "La NASA estudia huracanes desde el espacio con fotos como éstas, así como también realiza observaciones desde los satélites. Este punto de vista ayuda a los científicos a comprender cómo el cambio climático afecta a los huracanes, y también ayuda a las comunidades a comprender mejor estos fenómenos y a prepararse para ciclones tropicales en un mundo cada vez más cálido", señalaron.
Dónde está el Huracán Beryl y cuál es su peligrosidad
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional de México, el centro del huracán Beryl, de categoría 4 en la escala Saffir-Simpson, se ubica este miércoles 3 de julio en el mar Caribe y mantiene su desplazamiento hacia el oeste-noroeste con trayectoria hacia la Península de Yucatán.
En uno de sus últimos comunicados, señaló que Beryl se localizó a 580 kilómetros al este-sureste de Kingston, Jamaica, y a 1.695 km al este-sureste de Cancún, Quintana Roo, en México.
Además, presenta vientos máximos sostenidos 240 kilómetros por hora con rachas de 295 kilómetros por hora, y se desplaza hacia el oeste-noroeste a 35 kilómetros por hora.
Ante estas condiciones, el Meteorológico de México, en coordinación con el Centro Nacional de Huracanes, de Estados Unidos, estableció una zona de vigilancia por efectos de huracán desde Cabo Catoche hasta Chetumal, Quintan Roo.
El organismo indicó que "por el momento, dicho sistema no afecta costas mexicanas", sin embargo, de acuerdo a su trayectoria "se prevé que a partir del jueves, las bandas nubosas de Beryl ocasionen lluvias de intensas a puntuales torrenciales, rachas fuertes de viento y oleaje elevado en la Península de Yucatán".
Asimismo, el Centro Nacional de Huracanes (NHC) estadounidense advierte por vientos potencialmente mortales y tormentas después de provocar al menos siete muertos en el Caribe y destrucción generalizada en el sureste de la región.
Según los reportes de las autoridades, el fenómeno dejó al menos tres muertos en Granada, uno en San Vicente y las Granadinas, y tres en Venezuela.
Así, el organismo meteorológico indicó que esperaba que Beryl se "debilite" al llegar el miércoles frente a las costas de Jamaica, pero advirtió que azotará a la isla como una tormenta "casi mayor" con vientos potencialmente mortales, marejadas ciclónicas, lluvias e inundaciones repentinas.
Ante el alerta, Jamaica se prepara con refugios de emergencia en Montego Bay e instalaciones seguras en Kingston, según el periódico Jamaica Gleaner. "Insto a todos los jamaiquinos a que se abastezcan de alimentos, baterías, velas y agua. Pongan a salvo sus documentos importantes y retiren cualquier árbol o elemento que pueda poner en peligro su propiedad", apuntó el primer ministro de Jamaica, Andrew Holness, en X.
La NHC además pronosticó marejadas en las costas sur de Puerto Rico y La Española, donde están República Dominicana y Haití.
Huracán Beryl: el primero del 2024
Los expertos afirman que es inusual que un ciclón tan potente como Beryl se forme tan temprano en la temporada.
"Sólo se han registrado cinco huracanes importantes (Categoría 3+) en el Atlántico antes de la primera semana de julio", precisó en la red X el experto Michael Lowry.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) estadounidense también pronosticó a finales de mayo una temporada extraordinaria, con la posibilidad de entre cuatro y siete huracanes de categoría 3 o más.
Las temperaturas cálidas del océano son clave para los huracanes, y las aguas del Atlántico Norte son actualmente entre 1-3 grados Celsius más cálidas de lo normal, según NOAA.
"Está claro que la crisis climática está llevando los desastres naturales a nuevos niveles récord de destrucción", consideró el Secretario Ejecutivo del fondo de ONU para el Cambio Climático (UNFCC), Simon Stiell.
LA NASA explicó en su página web que los huracanes, que son ciclones tropicales que se forman sobre el Océano Atlántico o el Océano Pacífico oriental, "utilizan aire cálido y húmedo como combustible".
En tanto, el aire cálido y húmedo sobre el océano "se eleva desde cerca de la superficie, provocando un área de menor presión de aire debajo".
El aire de las áreas circundantes con mayor presión de aire "empuja hacia el área de baja presión". Entonces, ese aire “nuevo” se vuelve cálido y húmedo y también asciende.
A medida que el aire caliente continúa ascendiendo, el aire circundante se arremolina para ocupar su lugar. En tanto que mientras el aire cálido y húmedo asciende y se enfría, el agua del aire forma nubes. Todo el sistema de nubes y viento gira y crece, alimentado por el calor del océano y el agua que se evapora de la superficie.