Según un reciente informe del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), las consecuencias humanitarias de los ocho conflictos que vive Colombia se intensificaron y registraron un "deterioro significativo" entre enero y mayo pasados.

"En los primeros cinco meses del año, comparados con los primeros cinco meses de 2023, varios indicadores aumentaron de manera marcada como la contaminación por armas”, destacó el jefe de la delegación del CICR en Colombia, Lorenzo Caraffi.

Un reflejo de esta situación es que entre enero y mayo de este año, el CICR registró 194 víctimas de diferentes tipos de artefactos explosivos, un crecimiento del 35 por ciento con respecto al mismo periodo de 2023.

Y también que el 69 por ciento de las víctimas corresponde a civiles y es "el porcentaje más alto que se ha registrado en los últimos seis años", según esa organización internacional.

"Esto como resultado del recrudecimiento de las acciones armadas en algunas zonas del país y de la disputa territorial entre actores armados no estatales", detalló la fuente en su informe sobre Colombia.

Desplazamiento forzado y desaparecidos

Otro aspecto relevante es el aumento de la contaminación por armas. De los 43 municipios en los que se presentaron accidentes con artefactos explosivos en lo corrido del año, 15 no habían reportado víctimas en 2023. Esto significa que "el fenómeno se sigue extendiendo a nuevas zonas del país", agregó la información.

Igualmente, en los primeros cinco meses del año hubo 31.832 personas que fueron confinadas, un aumento del 101 por ciento frente al mismo periodo de 2023.

Además, 26.753 personas fueron víctimas de desplazamiento forzado, un 49 por ciento más de las que sufrieron esto mismo entre enero y mayo del año pasado. En más del 60 por ciento de los casos los afectados pertenecen a comunidades indígenas o afrodescendientes.

"A esta compleja situación humanitaria se suma la persistencia del fenómeno de la desaparición. Entre enero y mayo de 2024, el CICR documentó 78 casos de desaparición relacionados con los conflictos armados y la violencia que ocurrieron en esos mismos meses", añade el organismo, que el año pasado reportó 222.

El informe muestra también que en los primeros cinco meses del año fueron reportados 116 actos violentos contra quienes prestan asistencia en salud.

"De estos eventos, 73 ocurrieron en el marco de los conflictos armados, siendo Cauca el departamento más afectado por esta situación, pues allí se registró el 41 % de los casos", precisó el Comité.