Marcos Llorente, reconocido jugador del Atlético de Madrid, se encuentra nuevamente en el ojo de la tormenta. Esta vez, la controversia gira en torno al lanzamiento de Irreverentes, su nueva marca de café de especialidad, debido a su logo, que recuerda al emblema de las SS nazis.
El debate alcanzó su punto álgido cuando Llorente compartió una imagen del logo en su perfil de Instagram, desatando una lluvia de críticas y comentarios. Usuarios de diversas plataformas expresaron su indignación ante lo que percibieron como una inapropiada asociación con símbolos históricamente vinculados al nazismo. Frases como "¿Quién aprobó este diseño tan desafortunado?" y "Es preocupante que se trivialice un símbolo de esa naturaleza" inundaron las redes, pidiendo tener sensibilidad histórica y ética a la hora de crear diseños de marcas comerciales.
Más allá de elegir un símbolo prácticamente idéntico a la organización paramilitar de seguridad del Partido Nazi, la empresa se define como "canalla" y en la presentación del producto sostienen que se trata de un grupo de amigos que, sin saber absolutamente nada sobre el café, "quisieron conocer todo acerca de él".
Siempre Llorente
Esta no es la primera vez que Llorente se encuentra en el centro de la polémica. Previamente, el futbolista había generado críticas al afirmar públicamente que la exposición solar no estaba relacionada con el riesgo de cáncer de piel: "Si crees que el cáncer de piel aparece por culpa del sol, eres el rey de los ignorantes", escribió. Esta declaración fue recibida con preocupación por parte de la comunidad médica quienes respondieron advirtiendo de que "la radiación solar es un causante directo de la melanoma". "Apelamos al cuidado: la mejor protección posible y la exposición al sol recomendada", añadieron en un comunicado público, tras las expresiones desafortunadas del jugador del Aleti.
Además de las críticas por el logo de Irreverentes, el jugador "colchonero" enfrenta problemas legales con su restaurante Naked & Sated, ubicado en Pozuelo de Alarcón, Madrid. A pesar de ser un proyecto gastronómico prometedor en colaboración con Ibai Gómez y Gerard Deulofeu, el establecimiento fue recientemente clausurado por el Municipio local debido a la falta de licencia de actividad, tras recibir múltiples denuncias por problemas de ruido y olores.