Sasha Lyardet fue una de las detenidas en la marcha contra la Ley Bases del 12 de junio pasado. Ya en su casa, la joven contó en la 750 su experiencia previa y posterior a la detención y cómo afecta su vida la persecución del fiscal Carlos Stornelli, quien en los últimos días pidió que las personas liberadas vuelvan a ser encarceladas.
"Tengo bronca por los cinco compañeros y compañeras aún detenidos en penales de máxima seguridad, y por otro lado no puedo creer que Stornelli haya pedido nuestro encarcelamiento de nuevo sin demostrar pruebas concretas", sostuvo.
"En este caso se está eliminando la presunta inocencia y parece que los acusados tenemos que probar que somos inocentes, porque el fiscal que debería demostrar nuestra culpabilidad pide nuestra encarcelación sin poder adjuntar pruebas que digan que estábamos haciendo alguna de las cosas por las que se nos acusan", agregó Lyardet, en diálogo con Gustavo Campana.
Por otra parte, la joven detenida el 12 de junio pasado en las inmediaciones del Congreso afirmó que recibe a diario la "solidaridad y empatía" de mucha gente, cercana y no tanto, pero que vive esta situación con mucha "apatía". Asimismo, si bien se mostró "decepcionada" de que se hubiera aprobado la Ley Bases, no le "sorprende" el resultado legislativo.
"A diferencia de mucha gente que fue detenida o estaba en la movilización, nunca tuve esperanza en el cabildeo parlamentario y creía que la solución estaba en las calles. No me pude haber decepcionado de que haya salido la ley, pero me parece muy preocupante", señaló la joven.
"Cuando me liberaron fue la sensación más contradictoria que sentí en mi vida porque, por un lado, recuperaba mi libertad, iba a pasar mi cumpleaños en libertad, pero por otro adentro estaba quedando una compañera que estaba detenida desde el día uno conmigo, entonces no me podía sentir feliz", cerró.