Con tan solo 29 años, Martín Yeza se convirtió en el intendente más joven del país en 2015, durante la ola amarilla que arrasó con el mapa bonaerense. Gobernó Pinamar durante ocho años, siempre alineado con los principios del PRO y siguiendo el liderazgo de figuras como María Eugenia Vidal, Horacio Rodríguez Larreta y especialmente Mauricio Macri, el fundador del partido. Ahora, casi una década después de su entrada en la vida pública, Yeza fue ungido, nuevamente por el expresidente, para presidir la Asamblea Nacional del PRO. Este cargo, previamente prometido a Patricia Bullrich, lo deja en el centro de la política de alianzas electorales en un momento de feroz interna dentro del partido.
Martín Yeza nació en Buenos Aires, pero pasó gran parte de su infancia en Pinamar. Regresó a la capital para estudiar Derecho en la UBA y trabajó como periodista. Hincha de Estudiantes de La Plata y usuario activo de redes sociales, Yeza se presenta como una figura accesible y cercana a la gente. Sin embargo, ahora le tocará demostrar que puede liderar eficazmente en tiempos de turbulencia política.
Su breve trayectoria política incluye roles destacados como asesor de Felipe Solá en la Cámara de Diputados, seguido por su responsabilidad en las Políticas de Juventud durante la administración de Mauricio Macri en la Ciudad de Buenos Aires.
En 2015, Yeza regresó a Pinamar y se postuló como intendente por Cambiemos, obteniendo el 38,16% de los votos. Cuatro años después, fue reelecto.
Las causas judiciales
La corta carrera política de Yeza no estuvo exenta de polémicas. En 2021, fue denunciado por presuntas irregularidades en la obra pública de Pinamar. Yeza fue imputado por la fiscal federal Paloma Ochoa por malversación de fondos en el marco del plan de obras.
Otra causa relevante fue el robo de tarjetas Alimentar en Pinamar, en la cual se investigó el desvío de dos millones de pesos destinados a beneficiarios del programa. Yeza negó cualquier participación y fue absuelto en 2022, pero el caso dejó una mancha en su gestión.
El diputado y sus proyectos
En 2023 Yeza fue elegido como diputado de la Nación. Desde diciembre a la fecha, presentó varios proyectos polémicos y criticados por su desconexión con la realidad social del país. Uno de los más controvertidos es el de "desalojo exprés", que busca agilizar los procesos de desalojo en casos de incumplimiento de contratos de alquiler.
Su labor parlamentaria se completa con una serie de iniciativas que van desde el proyecto para expresar repudio por el comunicado de la Cancillería de Venezuela descalificando al presidente Javier Milei, hasta el establecimiento de "sandbox regulatorios" para entornos experimentales.
También propuso la regulación del uso de billeteras digitales y cajas de ahorro para menores de edad y la modificación del Código Penal para penalizar a quienes atenten contra la seguridad pública. Estas iniciativas reflejan la agenda de Yeza que, al parecer, está más orientada a satisfacer intereses específicos, que a abordar los problemas profundos que enfrenta el país.
La libertad de ser PRO
Ahora le toca una más difícil. El contexto no es el mejor. Martín Yeza es el nuevo presidente de la Asamblea Nacional del PRO y deberá enfrentar el desafío de mantener la cohesión dentro del partido en un contexto de divisiones internas.
El candidato de Mauricio Macri -aunque desde el entorno del expresidente remarcaron que el nombre de Yeza apareció como "un reclamo de los asambleístas para respetar la identidad del partido"- asumió este jueves en medio de una cumbre caliente que terminó sin los referentes de Patricia Bullrich, quienes se levantaron y abandonaron el recinto.
Yeza tendrá en sus manos la posible alianza con La Libertad Avanza (LLA) de cara a las próximas elecciones y ya adelantó la posición del partido. "No me parece inimaginable", expresó.
Si bien el diputado no desestimó la futura alianza -algo que intenta hace meses la actual ministra de Seguridad- afirmó que los "problemas profundos" que tiene la Argentina no los pueden resolver ninguno de los partidos políticos que existen. "El PRO debe convertirse en algo que no existe, que es un partido que se resignifique, se reinvente, que tome las mejores prácticas de lo que están haciendo en otras partes del mundo. Podemos tener nuestra propuesta", precisó.
La interna entre Macri y Bullrich crece cada día más. Mientras que la actual titular de Seguridad quiere "un PRO libertario", el expresidente mantiene distancia de esta idea ante los resultados negativos de la gestión de Milei. No quiere quedar pegado a un posible fracaso. Ya conoce lo que sucede cuando Caputo y Sturzenegger comandan la política económica.
Ante este panorama, el nuevo titular de la Asamblea aseguró que "si hoy el PRO no existiera, el Gobierno estaría en minoría absoluta en el Congreso de la Nación" y agregó que el primer objetivo para definir dentro del espacio es "trabajar para lo que se viene", ya que el espacio tiene "materia prima suficiente como para pensar en tener su propia propuesta".