Oficiales de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires allanaron este sábado a la madrugada un boliche del barrio porteño de Palermo para realizar tareas de investigación en el marco de una causa por la muerte de una joven de 21 años por sobredosis, y detuvieron a cuatro personas por una denuncia de venta de estupefacientes. Allí se comprobó la venta de estupefacientes en el interior del lugar, donde se realizaron compras controladas con resultado positivo.

Se trata del caso de una argentina que residía en España, quien murió el 10 de febrero tras la ingesta de “éxtasis adulterado”, según informó el personal médico del Hospital Fernández donde fue atendida. De acuerdo con las declaraciones de un amigo, la sustancia habría llegado a la joven dentro del establecimiento. Testigos de esa noche indicaron que luego de descompensarse, el personal de seguridad la sacó de la discoteca y dejó a la chica en la vereda.

La División Antidrogas Zona 1 de la fuerza de seguridad porteña es el ente que lleva adelante la investigación del hecho con la intervención del Juzgado de Primera Instancia en lo Penal, Contravencional y de Faltas N°9, a cargo de María Laura Martínez Vega. La funcionaria fue quien ordenó allanar el lugar y efectuar detenciones.

A través del trabajo de los detectives, quedó determinado que los dealers lograron ingresar al boliche sin revisión por parte del personal de seguridad. Por el momento hay varios detenidos, entre ellos, dos sospechosos de ser los vendedores, de 24 y 40 años; la encargada del lugar, de 39; y el propietario, de 60 años. 

Mediante las tareas de secuestro del personal policial se contabilizaron un total de 159 pastillas de distintas clases de éxtasis, cannabis en cigarros, dos bolsas de cocaína, cuatro celulares y 120.500 pesos en efectivo, y algunos otros elementos que podrían servir como evidencia para la causa.

Una tragedia que se repite

Las muertes por consumo de drogas sintéticas estimulantes en fiestas electrónicas vienen ocurriendo con cierta regularidad. En mayo de 2023 Leandro Darío Nespral de 27 años murió en el boliche Mandarine Park de Costanera --Buenos Aires-- habiendo consumido pastillas de “Moncler verde”, sin dudas confeccionada con una dosis mucho más alta de lo que puede resistir el cuerpo humano.

Ese mismo año Florencia Yturrioz murió tras haber asistido a una discoteca de Mar del Plata, habiendo consumido "éxtasis", tal como lo comprobó la policía científica. Florencia murió estando de vacaciones con sus amigas. Por ahora la investigación ha reaconstruido los instantes previos de la muerte de la chica: según el fiscal, el sábado 13 de enero las amigas estaban en una fiesta de música electrónica en el balneario MUTE en la zona del Faro. En la sangre le encontraron anfetamina y metanfetamina con las que se crea el "éxtasis".