“A muchos les falta el termómetro social de saber lo que viven los argentinos de a pie” dijo el arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, al hablar en la catedral metropolitana con ocasión de la ceremonia religiosa (te deum) celebrada por la fecha patria y a la que asistió el presidente Javier Milei, la vicepresidenta Victoria Villarruel (que no había estado la noche anterior en el acto de Tucumán) y los ministros del gabinete nacional. Siguiendo con su diagnóstico el arzobispo porteño pidió que “no hipotequemos el futuro” porqula educación básica tiene que ser el primer objetivo de un plan de desarrolloun analfabeto es un espíritu subalimentado