Durante la madrugada del martes 9 de julio, feriado nacional en conmemoración por un nuevo aniversario del Día de la Independencia, 17 gobernadores y el Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires legitimaron formalmente en la Casa Histórica de Tucumán el postergado y devaluado "Pacto de Mayo", el proyecto de país del presidente Javier Milei.
El ultraderechista tenía como intención que su propuesta sea acompañada durante la celebración del aniversario de la Revolución de Mayo, el 25 de mayo. Sin embargo, el jefe de Estado todavía no dominaba el arte de negociar y controlar a las provincias, por lo que, atemorizado con la idea de que ningún gobernador lo firme, decidió postergar el evento y, tal como ocurrió con el caso de la ley Bases --ya aprobada en el Congreso-- efectuar modificaciones a sus propuestas, hasta que sean aceptadas por la mayoría de los gobernantes.
Finalmente, el Pacto de Mayo fue modificado, y Milei marcó en su calendario el 9 de julio como la fecha en la que se firmaría. En rigor, el documento final se compone de 10 puntos que establecen el rumbo del país de cara a los próximos años:
1. La inviolabilidad de la propiedad privada.
2. El equilibrio fiscal innegociable.
3. La reducción del gasto público a niveles históricos, en torno al 25% del Producto Bruto Interno.
4. Una educación inicial, primaria y secundaria útil y moderna, con alfabetización plena y sin abandono escolar.
5. Una reforma tributaria que reduzca la presión impositiva, simplifique la vida de los argentinos y promueva el comercio.
6. La rediscusión de la coparticipación federal de impuestos para terminar para siempre con el modelo extorsivo actual que padecen las provincias.
7. El compromiso de las provincias argentinas de avanzar en la explotación de los recursos naturales del país.
8. Una reforma laboral moderna que promueva el trabajo formal.
9. Una reforma previsional que le dé sostenibilidad al sistema y respete a quienes aportaron.
10. La apertura al comercio internacional, de manera que la Argentina vuelva a ser protagonista del mercado global.
Bajo esas premisas, el "Pacto de Mayo" fue firmado por el Presidente, seguido por Jorge Macri (Ciudad Autónoma de Buenos Aires), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Raúl Jalil (Catamarca), Leandro Zdero (Chaco), Ignacio Torres (Chubut), Martín Llaryora (Córdoba), Gustavo Valdés (Corrientes), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Carlos Sadir (Jujuy), Alfredo Cornejo (Mendoza), Hugo Passalacqua (Misiones), Rolando Figueroa (Neuquén), Alberto Weretilneck (Río Negro), Gustavo Sáenz (Salta), Marcelo Orrego (San Juan), Claudio Poggi (San Luis), Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero).
También firmaron el presidente provisional del Senado, Bartolomé Abdala, y el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, los dos de La Libertad Avanza. Finalmente, se sumó la firma de la Secretaria General de Presidencia, Karina Milei, la única mujer.
Los seis gobernadores que rechazaron la invitación formal del jefe de Estado y no firmaron el documento fueron Axel Kicillof (Buenos Aires), Gildo Insfrán (Formosa), Ricardo Quintela (La Rioja), Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Sergio Ziliotto (La Pampa) y Claudio Vidal (Santa Cruz).
No asistieron al evento la mayoría de los expresidentes --salvo Mauricio Macri y Adolfo Rodríguez Saá--, los jueces de la Corte Suprema de Justicia, y la CGT, así como tampoco la vicepresidenta, Victoria Villarruel.