En junio, para no ser pobre por ingresos, una familia porteña necesitó tener ingresos por más de 890.590 pesos, lo que implica un 3,5 por ciento más que en mayo de 2024. El umbral de indigencia quedó en 496.898 pesos para el mismo tipo de familia y resultó un 2,2 por ciento superior al mes anterior. En tanto, la misma familia necesitó ingresos por 1.390.921,89 pesos en junio para ser considerada parte de la clase media. 

Los cálculos crecieron en el mes por debajo de la inflación general del período que fue de 4,8 por ciento, aunque en la comparación interanual ambas canastas continúan por encima de la inflación general interanual. Así lo determinó el informe "Líneas de pobreza y Canastas de consumo para la Ciudad de Buenos Aires. Junio de 2024" que publicó la Dirección General de Estadísticas y Censos de CABA

Sin embargo la familia utilizada como referencia para estos valores incluye una pareja compuesta por un varón y una mujer, ambos de 35 años, económicamente activos y propietarios de una vivienda, más dos hijos varones de nueve y seis años, respectivamente. Esto quiere decir que el monto debería ser mayor, teniendo en cuenta que más de un tercio de las familias en la Ciudad son inquilinas y que, de acuerdo al último informe de inflación de la ciudad, el aumento más significativo se dio en la división de Vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (+7,3 por ciento), a partir de la actualización de tarifas de luz, así como el avance en los valores de los alquileres y de los gastos comunes.

Para el caso de un hogar unipersonal, de un adulto varón de 25 años, económicamente activo y propietario de la vivienda, necesita ingresos por 162.927 pesos para no ser indigente y 314.801 pesos para no ser pobre. 

Para pertenecer a la clásica clase media porteña en junio fueron necesarios obtener ingresos por más de un millón de pesos. Este valor representa un incremento del 3,8 por ciento respecto de mayo, también por debajo de la inflación mensual. Hace un año, el cálculo era de 363.666,30 pesos, lo que marca un incremento del 282,5 por ciento, diez puntos porcentuales por encima de la inflación interanual (272,7 por ciento).