En su columna semanal en La García, el abogado Pablo Llonto analizó el desfile militar del 9 de julio y si hubo muestras de acciones "antidemocráticas" y qué consecuencias judiciales podría caberles a los responsables.

"De las secuelas del desfile militar del 9 de julio organizado por Javier Milei y Victoria Villarruel, una es, desde ya, la bandera que decía Los carapintadas tienen razón. Es un mensaje de los golpistas que se levantaron en 1987 y años siguientes. Hasta en el gobierno de Menem hubo levantamientos de torturadores y represores", explicó el letrado en diálogo con la 750.

"Y lo segundo, un grupo de veteranos de Malvinas entre los cuales estaba un grupo acusado de torturar a soldados en las islas durante la guerra. El que sobresale es un exoficial, Jorge Taranto, el más provocador de todos, porque en redes sociales hace desafíos con estos temas", agregó.

En este contexto, Llonto señaló la diferencia entre "delitos de lesa humanidad" y "graves violaciones a los derechos humanos", dos figuras que estarán en debate a la hora de acusar y llevar a juicio a los torturadores de soldados en la guerra de Malvinas. 

"En la causa de las torturas en Malvinas, que son muchísimas, hay más de 100 de hechos ocurridos en las islas, en la que se discute si fueron delitos de lesa humanidad está en la Corte hace más de dos años esperando una resolución, porque el fiscal de la Cámara de casación, Javier De Luca, interpuso un recurso extraordinario porque la Casación había dicho que no eran delitos de lesa humanidad", dijo. 

"En dicho recurso, De Luca habla que si no fueron delitos de lesa humanidad, entonces fueron graves violaciones a los derechos humanos, los cuales tampoco prescriben con el tiempo. La Corte tiene que resolver si esto fue delitos de lesa humanidad o se encuadra en graves violaciones de los derechos humanos", afirmó.

"Hay algunos antecedentes sobre hechos no ocurridos sobre el plan de exterminio, sino inclusive en democracia, que se los consideró graves violaciones a los derechos humanos, por lo tanto, no prescriben y el juicio se hizo y los militares fueron condenados", recordó al respecto. 

"No hemos visualizado de quienes han marchado, las tropas actuales, ningún hecho que pueda ser calificado como antidemocrático. Lo único fue este grupo de torturadores desfilando como veteranos de Malvinas y esa bandera que no llevaba firma y que no formó parte del desfile", sostuvo.

"De todos modos, molesta mucho lo que hizo Milei y Villarruel subiéndose a un tanque y riendo, pero nada que objetar desde el punto de vista de las causas de lesa humanidad. Hay una molestia en la reivindicación de lo que significa el rol de las Fuerzas Armadas en democracia, no ha habido ninguna palabra para criticar lo hecho en el pasado y decir que las FFAA tienen que alinearse con la defensa de la democracia", cerró.