La tenista checa Barbora Krejcikova (31°) le ganó en tres sets a la italiana Jasmine Paolini (7°) en la final de Wimbledon y obtuvo su segundo título de Grand Slam. La checa se impuso por 6-2, 2-6 y 6-4 en un duelo muy parejo, donde aprovechó los nervios de su rival en el último parcial para quedarse con la victoria luego de una hora y 56 minutos de juego. Este fue el octavo título como profesional para Krejcikova, quien además escalará desde el 32° hasta el 10° puesto del ranking WTA.

El momento clave de la final se dio en el séptimo game del set definitivo, cuando Paolini perdió su saque luego de una doble falta. De esta manera, le dejó el triunfo en bandeja a la checa, que solo debió que mantener sus últimos dos turnos de servicio.

En el último game, cuando servía para partido, parecía que se le escapaba el triunfo a Krejcikova, que cometió tres errores no forzados de manera consecutiva y le dio la oportunidad de reponerse a Paolini. Pero finalmente la checa pudo sacar adelante la situación para quedarse con el triunfo.

En su camino a la final, Krejcikova había vencido a Veronika Kudermétova, Katie Volynets, Jéssica Bouzas Maneiro, Danielle Collins, Jelena Ostapenko y Elena Rybakina. Paolini, por su parte, quedó nuevamente en las puertas de su primer título de Grand Slam. El mes pasado, en Roland Garros, cayó en la final tanto del singles como del dobles. Pese a esta dolorosa derrota, la italiana se meterá por primera vez en su carrera en el top 5 del ranking.