Tras diez años de litigio, Costa Rica celebró la victoria frente a una demanda interpuesta por una minera canadiense luego de que el país prohibiera la minería a cielo abierto y anulara los contratos extractivistas.
Desde Presidencia informaron que Costa Rica venció el contencioso internacional interpuesto por la minera Infinito Gold luego de que la Justicia costarricense clausurara en 2010 el yacimiento de oro por el impacto ambiental.
"El Gobierno de la república se complace en informarle al país que Costa Rica triunfó en el laudo interpuesto por Infinito Gold por el monto de 394,8 millones de dólares estadounidenses más intereses", indicó Presidencia en un comunicado.
La empresa acudió a un arbitraje internacional ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (Ciadi), organización del Banco Mundial con sede en Washington, pidiendo que Costa Rica pagase casi 400 millones de dólares como indemnización tras el cierre del proyecto minero.
"El Tribunal arbitral concluyó que era improcedente adjudicar daños a favor de la empresa Infinito Gold Ltda", indicó el texto.
El Congreso costarricense prohibió la minería a cielo abierto en 2010, poco después de la anulación del contrato de Infinito Gold en Crucitas, a unos 200 kilómetros al norte de San José, justo en la frontera con Nicaragua.
"Desde esa fecha mineros ilegales, la mayoría de nacionalidad nicaragüense, se dedican a la extracción de oro en la zona, sin contar con los permisos ambientales correspondientes", destacó la Presidencia.
Los "coligalleros", como se conoce en Nicaragua a quienes extraen los metales de manera ilegal, continúan usando ese yacimiento para extraer oro, que luego procesan con mercurio o cianuro. Según organizaciones ambientalistas, han provocado graves daños al suelo y los ríos de la zona.
Autoridades confirmaron que se realizará un "operativo policial especial" en la zona, que actualmente está custodiada por la Policía debido a los "saqueos ilegales, enfrentamientos y la venta de oro que se reportaba".