En una reciente denuncia pública, el bloque de concejales de Unión Por La Patria acusó al intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro, de no reducir el valor del boleto de colectivo, que actualmente se sitúa en 940 pesos, a pesar del significativo aumento en los subsidios al transporte por parte del Gobierno provincial.

Esto se produce luego del anuncio del incremento un 110 por ciento, con respecto al del año 2023, que realizó la gestión bonaerense en el presupuesto destinado para el Régimen Transitorio de Subsidios al Sistema de Transporte Público de Pasajeros del Interior bonaerense, cuyo aumento comenzó de forma retroactiva desde mayo de este año. Su fin es cubrir parte del monto total del boleto que pagan los usuarios y mantener el funcionamiento normal de los servicios en 23 municipios bonaerenses, incluida “La Feliz”.

El incrementó llevó el subsidio de los 983  millones de pesos a los 2068, en un movimiento en el UxP definen como "una respuesta al desentendimiento del Gobierno nacional liderado por Javier Milei”. A su vez, otros municipios aledaños como el de Villa Gesell lograron reducir el costo del boleto para los usuarios, mientras que en Mar del Plata y también en su vecino Tandil, el precio sigue siendo uno de los más altos.

Por esta razón, los concejales de la oposición sostienen que el intendente Montenegro no tomó medidas para trasladar los beneficios de estos subsidios a los usuarios del transporte público marplatense.

Mariana Cuesta, presidenta del bloque de concejales peronistas dice a Buenos Aires/12 que "el intendente siempre responsabiliza a otros por su falta de gestión, encontrando excusas para no hacerse cargo de resolver los problemas de los marplatenses". "El concejo deliberante le delegó las facultades a para fijar el precio del boleto, pero el gobernador aumentó el subsidio para el transporte y nosotros queremos saber por qué Montenegro no baja el precio del boleto”, agregó. 

La denuncia también subraya la urgencia de una respuesta por parte del gobierno local. Los concejales argumentan que la situación actual no solo afecta a los trabajadores y estudiantes que dependen del transporte público diariamente, sino que también representa una carga adicional para las familias en medio de una inflación creciente y una economía en dificultades. “Montenegro no se ha pronunciado públicamente acerca del tema, y desde el bloque de concejales exigimos que baje el boleto de colectivo al igual que ocurrió en otros municipios”, pidió Cuesta.

De este modo, la reducción del boleto de colectivo beneficiaría a los ciudadanos al aliviar el costo del transporte diario, especialmente en un contexto de alta inflación y presión económica como resultado de las políticas del Gobierno Nacional.

Cuánto vale el boleto en Mar del Plata

Actualmente, el boleto básico para trasladarse en la ciudad cuesta 940 pesos, ya que fue incrementado su valor el 1 de julio de este año y pasó a ser un 25 por ciento más caro. Sin embargo, existen trayectos desde la zona periférica urbana donde el precio aumenta considerablemente, volviendo el servicio más oneroso para quienes viven lejos del centro de la ciudad. Por ejemplo, para moverse hacia Batán o Sierra de los Padres el pasaje asciende los 1500 pesos y si ya hablamos de ir hasta Santa Clara el valor supera los 2500 pesos.

“Suelo utilizar cuatro boletos por día para poder manejarme en la ciudad, entre el trabajo, la facultad y mi entrenamiento. Entonces terminó gastando cerca de 4 mil pesos por día y si hablamos en un mes cerca de 80 mil. Es una locura”, contó Mía Gramaglia, vecina de Mar del Plata y añadió: “Mucha gente empezó a usar bicicletas y monopatines con mayor frecuencia para abaratar costos, pese al frío que suele hacer”.

La ciudad dispone de 32 líneas de colectivos urbanos e interurbanos, de las cuales 29 son de concesión municipal y 3 de concesión provincial. Estas líneas operan tanto dentro de los límites de la ciudad como en las áreas circundantes. En 2013, la flota de ómnibus en la ciudad contaba con 430 vehículos. En ese marco, otro de los problemas es la calidad del servicio por el estado de los colectivos. “Muchos de ellos son viejos y están en mal estado, lo que no solo afecta la comodidad de los pasajeros, sino que también aumenta el riesgo de accidentes, si le sumamos los pozos que hay en muchas calles”, completó la vecina.

Frente a esta situación, la presidenta del bloque de concejales de la oposición afirmó que continuarán exigiendo una nueva propuesta integral para el servicio urbano de pasajeros. Dentro de los principales pedidos aparecen que se deben mejorar las frecuencias, implementar terminales de viaje para combinar las líneas; disminuir los costos de transporte; garantizar unidades accesibles, y promover la paridad de género en el ingreso a las empresas transportistas, entre otras medidas.

Esperamos tener una respuesta del intendente y que el impacto del aumento del 110 por ciento de aportes provinciales en los subsidios al transporte, se vea reflejado en una contundente reducción del costo del boleto”, aseguró Cuesta.

Por otro lado, cabe recordar que el gobernador Kicillof fue enfático en la necesidad de contar con los subsidios para garantizar que los servicios de transporte público puedan continuar operando sin interrupciones.

“En línea con el mundo libertario”

El diputado provincial y exintendente de la ciudad, Gustavo Pulti, cuestionó el comportamiento del Ejecutivo municipal comparándolo directamente con las políticas nacionales. “Estas son conductas que definen un encuadramiento ideológico de gobiernos que ya sabemos que están decididos a sacar el Estado donde hace falta usar el Estado en beneficio de los que más tienen y reducir los beneficios y las promociones del Estado para quienes más lo necesitan”, lanzó ante la consulta de este medio. 

Por su lado, Cuesta consideró que este tipo de acciones “tienen que ver con ser duros con los desprotegidos y blandos con los más beneficiados por el sistema económico". “Imagínese pagar casi 1000 pesos por un boleto plano de colectivo, en unidades que distan mucho de la excelencia”, agregó.

Por último, la presidenta del bloque de concejales peronistas criticó la política “destructiva del salario y del mercado interno argentino que lleva adelante el Gobierno nacional”. “Esto solo puede ser perjudicial para una ciudad turística, productiva y diversificada como Mar del Plata, y nosotros vemos con preocupación cómo se están tomando medidas que favorecen a los sectores concentrados de la economía por sobre las clases populares en nuestro país”, concluyó.