La tropa libertaria salió a respaldar a Javier Milei y redobló las críticas contra Irán, luego de que desde Teherán hayan amenazado al gobierno argentino con hacer "lamentar la enemistad" entre ambos países. En el marco de la conmemoración de los 30 años del atentado contra la AMIA, funcionarios de primera línea replicaron las palabras del mandatario y minimizaron la intimidación. "Al Presidente, no lo van a amedrentar", dijo el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. "Argentina no va a tolerar amenazas de ningún estado", sumó la vicepresidenta Victoria Villarruel. 

El mensaje que bajó Milei es que la amenaza "lo tiene sin cuidado". "Todos conocen su personalidad, cuando se trata de defender posiciones ideológicas o derechos esenciales, no tiene ninguna duda", dijo Francos y remató: "No lo van a amedrentar". Las declaraciones del jefe de Gabinete respondieron a un editorial del Tehran Times, que oficia de vocero del gobierno islámico, en el que se expresa que Irán hará "lamentar la enemistad" a la Argentina.

“Llama un poco la atención la impunidad con la que se hacen este tipo de amenazas, pero eso no tiene que torcer la convicción de los argentinos de vivir en libertad y en paz”, agregó Francos. Y concluyó: “Uno no puede someterse a los que pretenden infundir miedo y terror, sino que tiene que expresar sus opiniones con libertad y, sobre todo en este caso, cuando la Argentina como país ha hecho cargo a un gobierno y a sus organizaciones adláteres de responsabilidades que han generado la muerte de muchos argentinos”.

Con el mismo tono confrontativo, Villarruel aseguró que Argentina "no va a tolerar amenazas de ningún estado" ni que se "aterrorice" a la población, a la vez que dijo que el Gobierno exige Justicia por "las víctimas del terrorismo". "Reclamamos como Estado argentino verdad, justicia y reparación para cada una de nuestras víctimas", señaló al llegar a la sede de la AMIA, donde se desarrolló el acto central por el 30 aniversario del ataque. "Aquel que comete un atentado luego también va a tratar de atemorizar a la población. Está en nosotros el unir el entramado social para que no sienta temor y miedo", añadió.

En la sede de la calle Pasteur también se expresó Patricia Bullrich. Con impronta patoteril, la ministra de Seguridad aseguró que “a nosotros no nos amenaza nadie, a la Argentina no la amenaza nadie”. “La que fue golpeada fue la Argentina y está probado que el atentado se organizó desde la embajada de Irán en la Argentina y eso implica un crimen de lesa humanidad. Los vamos a buscar hasta el último día de sus vidas (a los responsables)”, manifestó.

En la misma línea, el ministro de Defensa, Luis Petri, dijo que la Argentina "no se va a amenazar por nada" y pidió que se apruebe el proyecto de Juicio en ausencia, con el fin de poder avanzar con el enjuiciamiento de los ciudadanos iraníes acusados de participar del atentado. La iniciativa, que propone modificar el Código Procesal Penal y el Código Procesal Penal Federal, ya fue presentada en el Congreso y tiene el respaldo de legisladores aliados.

La catarata de respuestas del Gobierno llegó después de dos declaraciones provenientes de Irán. Por un lado, la publicación en el diario Tehran Times, que reiteró su “rechazo a las hipotéticas acusaciones de la justicia argentina contra los ciudadanos iraníes” por el atentado y condenó el alineamiento libertario con Estados Unidos e Israel. “Teherán va a imponer su propio juego respecto del enemigo y hará que se arrepienta de su enemistad con Irán”, lanzó.

La amenaza se sumó a un comunicado que emitió el ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, en el que cuestionó a la gestión de Milei por acusarlos de participar del ataque en 1994. “El descubrimiento de la verdad y la solución definitiva de este caso solo es posible si las partes involucradas en Argentina se alejan de los intereses políticos y no se ven afectadas por la influencia y la intervención de terceros”, señaló el portavoz del ministerio iraní, Naser Kananí. Así, el vocero le solicitó a las autoridades argentinas “evitar declaraciones y acciones antiraníes" y pidió "que no pongan en riesgo los intereses nacionales y los beneficios de las relaciones bilaterales, prestándose a las “intrigas israelí-estadounidenses”.

A pesar de las palabras de Naser Kananí y del editorial del Tehran Times, Milei mantuvo el mismo discurso de siempre. El miércoles, en el Congreso Mundial Judío, responsabilizó a Irán, Hezbolá y Hamas por el atentado que dejó 85 muertes y más de 300 heridos.

"El terrorismo que se vio del 7 de octubre" del año pasado en el atentado contra Israel "es el mismo terrorismo que nos atacó a nosotros" en la AMIA, sostuvo y defendió el juicio en ausencia. "Estamos impulsando una ley para extender el juicio en ausencia a delitos de extrema gravedad, lo cual permitirá juzgar a los dirigentes del régimen iraní involucrados en el atentado. Aunque quizás nunca puedan cumplir una sentencia, no podrán escapar a la condena eterna de que una corte libre demuestre su culpabilidad ante el mundo entero", remarcó.