"Segundo, Francia". Ese recurso, que se repitió como chiste -hasta casi el hartazgo- tras la consagración en Qatar, fue el que decidió utilizar Victoria Villarruel para volver a chicanear al país europeo y así, posicionarse en la guerra interna con el presidente Javier Milei. Lo hizo, otra vez, en un posteo en redes sociales, en el que le respondió a un usuario que le había pedido que deje pelearse con su excompañero de fórmula. "Yo no hago campaña y honro mi cargo laburando como una máquina incluido los fin de semanas", contestó luego de usar el latiguillo futbolero.
El comentario es apenas un apéndice de otra de sus publicaciones que generó malestar interno, al punto de que Karina Milei hizo un viaje de relámpago hacia la embajada de Francia para evitar que escale un conflicto democrático y permitir así que su hermano viaje a París para ver los Juegos Olímpicos sin inconvenientes. Pero si bien es una chicana también es otra muestra más de que a Villarruel no le asusta la disputa interna con Milei. Y eso se puede ver en su poca -o nula- gestión para habilitar la discusión sobre los pliegos de los aspirantes a la Corte (Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla) o bien, en su reafirmación del posteo que denomina a Francia como "país colonizador", del que aún, en su cuenta personal de Twitter, permanece como "mensaje destacado".
Las esquirlas de la guerra entre presidente y vicepresenta también llegaron a la disputa partidaria. Tal como contó este diario, el rearmado del Partido Demócrata nacional. Porque ese sello, ligado más a la derecha que al centro de ese mismo espectro, tenía como referenta principal a Victoria Villarruel. Incluso, la vice era la secretaría general del PD y cumplía el rol de presidenta en el armado bonaerense del propio partido. Pero el terremoto entre "jamoncito" y uno de los panes -escena configurada por la propia Villarruel- provocó que Villarruel renuncie a sus cargos. A modo de ¿venganza? desde el PD respondieron con un comunicado en el que dejaron trascender que su único líder es Javier Milei.
En Casa de Gobierno todavía resuena el faltazo que pegó Villarruel a la firma del Pacto de Mayo. Y dejan trascender vía algunos periodistas de televisión que la vice "está más cerca de las casta que de las fuerzas del cielo". De los pocos que recogieron el guante y defendieron a la dirigente de la familia militar fue uno de de los senadores libertarios, Francisco Paoltrini, quien criticó al Ejecutivo por "el mensaje contradictorio" que enviaron el presidente Javier Milei y la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, al contradecir la posición de Villarruel respecto a los cánticos racistas de los jugadores de la Selección. “Está mal desautorizar a una vicepresidenta”, remarcó el legislador este lunes.