Llegó sola hace años desde Ecuador, buscando mejores condiciones de vida, pero murió de frío en la semana de la ola polar de uno de los inviernos más crudos, mientras se encontraba en situación de calle. Heidy Machado tenía 39 años y el 8 de julio se convirtió en la quinta persona en morir a la intemperie, en la Ciudad de Buenos Aires. Era trans, migrante y pobre.

Previo a su muerte, sus compañeras