El candidato a presidente de la oposición en Venezuela, Edmundo González Urrutia, habló en las horas previas a la jornada electoral del próximo domingo sobre el programa geopolítico y económico de la gestión en caso de ganarle a Nicolás Maduro, lo que de acuerdo con los sondeos previos podría ser una gran posibilidad. En una serie de entrevistas, largó definiciones clave sobre la integración regional, la relación con la Argentina y marcó distancias con el plan económico de Javier Milei.
González Urrutia, diplomático de carrera que ha encabezado la misión en la Argentina durante el primer gobierno de Hugo Chávez, dijo que confía en el sistema electoral venezolano y que espera que, en caso de ser vencido, Nicolás Maduro admita los resultados. En este sentido, incluso, no descartó un traspaso adelantado, puesto que aún restan seis meses para la fecha en que debería asumir la nuev administración.
Qué dijo el candidato a presidente de Venezuela sobre Milei
Consultado sobre su plan de gobierno y posibles similitudes con la gestión económica de Javier Milei, González Urrutia marcó una fuerte distancia y dijo que no avanzará en una desregulación total de la economía ni la destrucción del Estado, y aclaró que no tiene previsto privatizar la petrolera estatal venezolana PDVESA.
“Nuestro plan es muy claro, hemos tomado elementos del plan de Gobierno de María Corina, Tierra de Gracia; pero también del Plan País de 2019, y de otros proyectos programáticos anteriores. Un proyecto de centro, equilibrado, con presencia estatal”, expresó de manera concisa al diario El País de España.
Y, ante la pregunta particular sobre el futuro que tocará a Petróleos de Venezuela, siguió marcando su distancia de Milei, quien en Argentina tiene a Federico Sturzenegger al frente de la desregulación y privatización de todo lo que se pueda privatizar.
“Las empresas estatales que funcionen, se mantendrán. Tendremos que buscar ayuda para impulsar proyectos rezagados, y el estado no tiene por qué estar metido en todo, administrando hoteles o líneas de taxi. Hay que ampliar la participación del sector privado”, dijo en tono moderado.
De hecho, los tratos con el propio oficialismo también mantienen este tono moderado y distante de las exuberancias de autodefinido liberal-libertario: “En diversas oportunidades lo hemos dicho, mi Gobierno será abierto, de todos. Los adversarios serán respetados, nunca serán tratados como enemigos. No habrá persecución. Vamos al reencuentro, a la reconciliación”.
La referente de la oposición, que acompaña codo a codo a González Urrutia, María Corina Machado, también hizo énfasis en este tema. “Creo que el criterio que va a usar el presidente será buscar la lógica de la paz”, dijo. Y agregó: “Lo más importante es cómo recuperamos la confianza. Esto es una tarea de todos. Construir unos pilares éticos y liberales muy sólidos”.
Ante la pregunta de Clarín, el candidato presidencial fue más específico sobre la relación que buscará tener con el Gobierno de los hermanos Milei, con quienes volvió a mantener una contundente distancia: “(Espero) volver a tener las mismas relaciones cordiales que habíamos tenido con todos los países de la región y con todos los países Caribe también”.
