El filósofo y escritor Juan Giani presenta su último libro Perón/Milei. Justicia social o anarco capitalismo, el viernes 2 de agosto a las 18.30 en el salón de Actos de la Facultad de Humanidades y Artes (Entre Ríos 758). En la presentación estará acompañado por el doctor en Ciencias Sociales, Oscar Madoery, y el periodista de Rosario/12 Leo Ricciardino.
En el prólogo del libro, Giani plantea que "durante los años de gobierno de Mauricio Macri aconteció un episodio simbólicamente sintomático. En el diseño de los billetes desaparecieron los próceres y se apeló para su reemplazo a una nomenclatura inspirada en animales. Como bien ya sabemos, la interpretación de los linajes patrios se estampa también en calles y monumentos, pero el dinero circulante tiene una repercusión mayúscula pues su uso habitual coloca al debate identitario en estado de exhibición permanente".
"Desde ya que a Macri las encrucijadas culturales lo entusiasmaban relativamente poco, pero en ese desdén historiográfico operaban además otras cuestiones. Apaciguaba por un lado los conflictos hermenéuticos supuestamente detonados por el kirchnerismo, pero por el otro revelaba el vacío de historicidad de esa fuerza novedosa que acababa de ganar las elecciones del 2015. Puesto de otra manera, por esperables razones el blasón nacional y popular era vilipendiado, pero la tradición liberal resultaba a su vez incómoda pues la UCR (principal aliada del Presidente) irrumpió a la vida política calificando severamente a la Generación del 80 como un régimen 'falaz y descreído'!, agrega.
"Pues bien, Javier Milei aunque anudado en hermandades ideológicas con el macrismo, ha preferido claramente otro camino y se afinca todo el tiempo en los prestigiosos pergaminos de la tradición liberal. Su desaforada batalla cultural no solo embate contra los zurdos, el feminismo o los pueblos originarios, sino que también implica involucrarse en una provocativa controversia respecto de las nervaduras primigenias de la nación.
"Esa estrategia exegética sobre el pasado es no obstante selectiva, pues en las alforjas del procerato liberal decimonónico no solo hay un listado cuantioso de celebridades (Esteban Echeverría, Juan María Gutiérrez, Vicente Fidel López, Bartolomé Mitre, Domingo Faustino Sarmiento) sino además discrepancias notorias entre ellos en lo que hace a núcleos centrales de la formación del estado nacional. El Presidente se embandera fielmente con uno de sus exponentes (Juan Bautista Alberdi) y sucedáneamente con quien plasmó administrativamente buena parte de sus recomendaciones (Julio Argentino Roca).
"Con Alberdi se verifica algo llamativo, pues los publicistas del neoliberalismo lo sienten propio y la corriente revisionista en parte también. Con Sarmiento (la otra gran estrella de ese firmamento) sucede lo contrario. Los voceros del liberalismo contemporáneo le rehúyen pues parecen considerarlo incómodo, y los pregoneros del nacionalismo popular lo culpan (con una cuota de justicia) por albergar bajo su antinomia civilización-barbarie una visión del país extranjerizante y excluyente.
Sobre esa extraña ambivalencia de la figura del tucumano habría mucho para decir, pero en este prólogo vale en todo caso exponer con mayor detenimiento en qué fibra ideológica se entronca Milei para librar su mesiánica lucha contra cien años de decadencia populista".
